Las autoridades sanitarias de Cataluña (noreste) anunciaron el primer caso de microcefalia en España y el segundo en Europa asociado al virus zika, detectado en el feto de una mujer embarazada.
«Una mujer embarazada ha sido infectada por zika y dengue y el feto presenta varias malformaciones», indicó por la noche el departamento regional de Salud en un comunicado.
«La malformación se identificó entre las semanas 19 y 20 de embarazo. Presenta varias malformaciones: microcefalia y alguna otra», explicó el viernes el responsable regional de salud pública, Joan Guix, en una rueda de prensa.
Se trata del segundo caso de microcefalia por zika detectado en Europa, después de uno identificado en Eslovenia, según la OMS. A nivel mundial sólo siete países han registrado casos de malformaciones en fetos producidas por el zika, la mayoría en Brasil.
Según datos del ministerio de Sanidad actualizados por última vez el 3 de mayo, en España hay 105 personas con el virus, que se infectaron viajando a zonas de riesgo, trece de ellas mujeres embarazadas.
En España la población procedente de América Latina y el Caribe, foco de la epidemia, representa un 21,8% del total de los extranjeros, por lo que estos viajes son frecuentes.
Las autoridades no ofrecieron ningún otro dato de la paciente, para preservar su privacidad.
Según la prensa, la mujer habría decidido seguir adelante con el embarazo. «Estas alteraciones provocan una enorme dificultad pero no suelen provocar la muerte del feto», señaló la doctora especialista en ginecología Elena Carreras.
La microcefalia es una malformación grave e irreversible que se caracteriza por una talla anormalmente pequeña del cráneo en los recién nacidos y por déficits neurológicos asociados.
Las autoridades sanitarias catalanas informaron también que a finales de abril, una mujer infectada dio a luz y su bebé nació sin ningún tipo de malformación.
Riesgo bajo en Europa
Este último brote de zika, un virus transmitido por el mosquito Aedes aegypti, apareció en América Latina en 2015 y se extendió rápidamente por la región. El país más afectado es Brasil, con alrededor de 1,5 millones de infectados y casi 1.300 casos de microcefalia.
Esto preocupa especialmente de cara a los Juegos Olímpicos que se celebrarán este verano en Río de Janeiro y a los que acudirán miles de personas de todo el mundo. Los organizadores lanzaron una aplicación para prevenir el zika que, de todos modos, esperan que esté en retroceso debido a la llegada del invierno.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró una emergencia sanitaria por el vínculo entre el contagio de zika en mujeres embarazadas y un aumento de casos de bebés con microcefalia.
Este virus, para el que no hay tratamiento ni vacuna, era bastante desconocido para el mundo científico y hasta mediados de abril no se pudo confirmar, a través de unos investigadores estadounidenses, que «causa microcefalia y otros defectos cerebrales graves en el feto».
Según la OMS, la epidemia está en fase descendente en Latinoamérica y el Caribe aunque se teme una posible extensión a otras regiones. En Europa, por el momento, todos los casos son importados pero la llegada del verano boreal y la aparición de los mosquitos podrían provocar infecciones locales.
El riesgo, sin embargo, es bajo pues en este continente el mosquito Aedes aegypti, el transmisor idóneo del zika, no esta extendido. Otro insecto de su familia, el mosquito tigre, habita en algunas zonas del sur de Europa pero su capacidad de contagiar este virus es mucho menor.