Miembros de Cruz Roja Nicaragüense llegaron a atender a un hombre de unos 68 años conocido como Carlitos El Barbero, que se encontraba ingiriendo licor con unos amigos y al quedarse dormido después de unas tres pachas (botellas) se cayó a un cauce, provocándose una herida en la cabeza.
El cauce que no mide más allá de los 3 metros de profundidad le sirvió para que no se matara, sin embargo esto no fue del todo sorpresivo para los pobladores del barrio Milagro de Dios de Managua, ya que para ellos esto es un caso común, pues aseguran que normalmente siempre los borrachitos se ponen a beber en este punto y siempre sale su rajado de cabeza ya cuando están bien anestesiados (ebrios).
El anciano fue atendiendo la noche del jueves por los técnicos que controlaron la abundante emanación de sangre que tenía el hombre para poderlo llevar a un centro asistencial donde lo atenderían. El señor tiene una herida abierta como de unos 7 centímetros. Necesita puntos de aproximación, vamos a llevarlo al hospital Manolo Morales para que lo valoren, informó el técnico Carlos Obando de Cruz Roja Nicaragüense.
Los pobladores hacían la solicitud que a través de este medio de comunicación se hiciera el llamado a la Policía Nacional para que lleguen a levantar a todos estos borrachitos que normalmente ya una vez ebrios empiezan a acosar y decir obscenidades a quienes vayan pasando por el sitio, lo que se ha vuelto un poco molesto para ellos ya que no respetan ni a los menores de edad.