Los cuatro sospechosos del asesinato de la ambientalista Berta Cáceres fueron enviados a prisión, una vez concluida la audiencia de declaración de imputados.
La comparecencia se llevó a cabo la noche del pasado lunes en los juzgados de Tegucigalpa, capital de Honduras. A los cuatro detenidos se les acusa por los delitos de asesinato en perjuicio de la activista indígena Berta Cáceres y asesinato en su grado de tentativa en contra del ambientalista mexicano, Gustavo Castro.
Las capturas se realizaron en el marco de la operación Jaguar, en la cual participaron al menos 150 elementos de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC).
El desplazamiento del contingente militar y policial comenzó a las seis de la mañana en diez operativos simultáneos.
Durante la acción se allanaron diez viviendas en La Ceiba, Trujillo y Tegucigalpa, dejando como resultado el cumplimiento de las cuatro órdenes de captura de los sospechosos.
Los detenidos fueron identificados como Sergio Ramón Rodríguez, técnico ambientalista de la empresa encargada del proyecto hidroeléctrico, Douglas Geovanny Bustillo, considerado uno de los gatilleros.
Además se detuvo a dos sujetos con formación militar, las cuales responde a los nombres de Edilson Antonio Duarte, un capitán retirado del Ejército y el mayor de infantería en servicio activo Mariano Díaz Chávez.
Los familiares de Berta Cáceres se pronunciaron el pasado lunes sobre las capturas, exigiendo se detengan a los autores intelectuales del crimen.
Además piden que la suspensión inmediata y definitivo del proyecto hidroeléctrico Agua Zarca.
La activista indígena fue asesinada el pasado 3 de marzo cuando dos encapuchados ingresaron a su casa y la atacaron a balazos, su muerte trascendió las fronteras del país, por su lucha contra la destrucción del medio ambiente.