Los bomberos terminaron este lunes de apagar el incendio que arrasó la víspera la catedral ortodoxa serbia de Nueva York, un templo histórico en pleno centro de Manhattan del que quedaron solo los muros y que se encontraba vacío al momento del siniestro.
Un vocero del Departamento de Bomberos de Nueva York indicó el domingo a la noche a la AFP que hubo un «herido leve», el portero de la iglesia, por el incendio que se declaró a las 19H00 locales (23H00 GMT) en la calle 26 y Broadway del barrio de Flatiron.
El padre Djokan, que ofició la misa el domingo por la mañana, explicó a la AFP que hubo «mucha suerte» de que la catedral de San Sava estuviese vacía cuando comenzó el incendio, cuyo origen aún se desconocía.
«Tuvimos misa el domingo. Había unas 700 personas. Terminó cerca de la una de la tarde. No había nada en la iglesia y pasó esto», dijo este sacerdote nacido cerca de Sarajevo en la República Srpska, la entidad serbia de Bosnia-Herzegovina.
Voraces llamas de varios metros de altura se alzaron durante horas por el techo y a través de los ventanales del templo, construido en los años 1850 y de estilo gótico y que pertenece a la Iglesia ortodoxa serbia desde hace más de 70 años.
Varios carros de bomberos se dirigieron al lugar y unos 170 miembros del cuerpo lucharon contra el siniestro desde la calle y edificios vecinos hasta lograr controlarlo por la noche.
El lunes por la mañana los bomberos continuaban trabajando para terminar de extinguir los últimos focos del incendio y apuntalar los muros y la fachada del templo, cuyo techo fue consumido por el fuego, al igual que su interior.