La policía británica pidió disculpas a las familias de los 96 muertos en el estadio inglés de Hillsborough, Sheffield (norte) en 1989, después de que una investigación les acusara de negligencias varias.
«Quiero pedir disculpas sin reservas a las familias y a todos los afectados», dijo el comandante de la policía del condado de South Yorkshire, David Crompton.
Los 96 hinchas del Liverpool murieron asfixiados y aplastados contra las vallas del estadio de Hillsborough en un partido de semifinales de copa, después de que la policía abrió la puerta de acceso a la tribuna y los hinchas entraron en tromba.
En el momento de los hechos, la policía y parte de la prensa culpó a los hinchas de estar borrachos y de haber tratado de acceder al estadio sin entradas, pero la investigación concluyó que la muerte de los aficionados fue un delito, y no un accidente, en el que no tuvieron ninguna culpa.
La investigación fue el resultado de casi tres décadas de lucha de las familias por limpiar el nombre de los suyos.