Al menos 18 personas murieron y varias más están desaparecidas tras el hundimiento de una embarcación frente a la costa del estado Rakhine, en el oeste de Birmania (Myanmar).
El incidente ocurrió ayer cuando el barco fue golpeado por el fuerte oleaje mientras intentaba llegar a tierra cerca del mercado de Thae Chaung, en las afueras de Sittwe, la capital de Rakhine, según la organización «Migrant Report».
La embarcación transportaba unas 60 personas, todas ellas de la minoría musulmana rohingya, desde el campo de desplazados de Sin Tet Maw hasta el mercado segregado para esta comunidad perseguida en este país de mayoría budista.
Este mercado es uno de los escasos lugares en el que pueden abastecerse los rohingya, que tienen restringida su libertad de movimientos y prohibido el comercio con la población budista desde el brote de violencia sectaria en 2012.
Birmania no reconoce la ciudadanía a los rohingya, a los que considera inmigrantes ilegales bengalíes pese a que muchos de ellos han vivido en la zona durante generaciones.
La situación de esta minoría en Bangladesh, su supuesto país de origen, no es mucho mejor, con entre 300.000 y 500.000 miembros en campos de refugiados.