El gobierno salvadoreño declaró este jueves una alerta en la capital, San Salvador, y 13 ciudades de su periferia ante la escasez de agua potable debido al efecto del cambio climático.
«Hemos declarado alerta para el área metropolitana de San Salvador y se activa el servicio de Protección Civil que nos permite implementar medidas urgentes para el abastecimiento y provisión de agua potable en zonas y comunidades que presentan graves problemas de abastecimiento», dijo en una rueda de prensa el director de Protección Civil, Jorge Meléndez.
Según un informe de la estatal Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA), casi una treintena de comunidades y colonias en ciudades del departamento de San Salvador, incluyendo sectores de la capital, tienen problemas de desabastecimiento de agua potable hasta por una semana completa. «Nosotros entendemos el problema de la escasez de agua y pedimos disculpas a la población por los efectos que causa esta escasez«, dijo en la misma rueda de prensa el presidente Salvador Sánchez Cerén.
El mandatario explicó que la empresa nacional de aguas se ha declarado en estado de «emergencia», a fin de buscar medidas que permitan paliar la situación.
El presidente de ANDA, Marco Fortín, agregó que entre tales medidas está la perforación de unos cuatro pozos en el departamento de San Salvador para extraer agua, potabilizarla y paliar la escasez.
Por su parte, el director de Protección Civil afirmó que se instalarán reservorios de agua en las zonas más afectadas y que también se establecerá un servicio de distribución del líquido en camiones cisternas.
Fortín indicó que la demanda de agua potable en el departamento de San Salvador, que cuenta con una población de 1,7 millones de habitantes según datos oficiales, es de 4,4 metros cúbicos de agua por segundo.
No obstante, ANDA solo logra suplir poco más del 50% debido a la poca disponibilidad del líquido y a las innumerables pérdidas por fugas en la red de cañerías de agua potable.
La ministra de Medio Ambiente, Lina Pohl, dijo que los mantos de los que se extrae el agua para abastecer la capital han registrado una disminución de entre un metro y metro y medio en su nivel. «El cambio climático es responsable de muchas cosas, y ese fenómeno ha causado que se registre menos lluvia, la recarga de los mantos freáticos ha sido menos y en época seca los niveles de esos mantos han disminuido notablemente», explicó Pohl.