A dos cuadras de llegar a su casa se le fue quitada la vida a Uriel Ramírez de 38 años, quien viajaba con su primo en su carreta en la carretera a Xiloá cuando dos personas a bordo de una motocicleta lo embistieron en la parte trasera, impactando el fallecido en el pavimento y provocándose una muerte instantánea.
Según testigos la motocicleta se dirigía por la calle haciendo maniobras, por el claro estado de ebriedad en el que se desplazaban, yendo a dar con el propio centro de la parte trasera de la carreta jalada por un caballo, que también agarró terminación al quedar herido y renco sin poderse mover del suelo.
Bomberos y cruz rojistas llegaron al lugar para tratar de hacer algo por la vida de este hombre; pero fue imposible ya que no poseía signos vitales, solo atendieron al acompañante del fallecido que también había resultado golpeado. Decían los paramédicos que la muerte fue instantánea, por que el golpe mayor recibido fue en la cabeza, donde tenía varias heridas, además de los ojos inflamados por el brutal impacto en el pavimento
El ahora occiso deja dos pequeños en la orfandad y sin el amor de un padre. Al momento del trágico accidente el fallecido andaba trayendo el dinero para la provisión de la semana, así lo relataban quienes en vida lo conocieron.
Los detenidos fueron llevados al distrito X de policía porque los familiares del occiso querían tomar la justicia en sus manos por la injusticia cometida por un par de sujetos que circulaban en completo estado de ebriedad.
El cuerpo sería llevado al Instituto de Medicina Legal donde se le haría la debida autopsia, y que el informe de las causas de la muerte sea una prueba mas en contra de los sujetos que le quitaron la vida a este pobre hombre.