Autoridades belgas identificaron como Mohamed Belkaid, un argelino de 35 años, al hombre armado que murió en un operativo para hallar a los sospechosos de los atentados de París, y dijeron que la policía detuvo a otras dos personas y encontró una bandera del Estado Islámico en el lugar.
Los investigadores creen que adolescentes franceses y belgas, que combatieron como militantes en Siria, planificaron parcialmente los tiroteos y ataques suicidas con bomba que sacudieron la capital francesa el 13 de noviembre y dejaron 130 muertos.
El martes, una o más personas abrieron fuego contra policías belgas y franceses que llevaban a cabo un registro de rutina de un apartamento en un suburbio de Bruselas. Cuatro policías resultaron heridos en el registro y el tiroteo que siguió.
Un francotirador de fuerzas especiales disparó y mató a Belkaid cuando este intentó dispararle a un policía desde una ventana, dijeron fiscales.
Dijeron que un fusil Kalashnikov y un libro sobre salafismo, una rama radical del Islám, fueron encontrados junto al cuerpo de Belkaid y que el argelino vivía ilegalmente en Bélgica.
En el departamento en el sur de Bruselas también se halló una escondite con municiones y una bandera del Estado Islámico, dijo el fiscal que investiga el caso, Eric Van der Sypt.
Investigadores detuvieron a un hombre que fue ingresado en un hospital cerca de Bruselas con una pierna rota. La persona que lo llevó al hospital escapó cuando llegó la policía local.
Otro sospechoso fue detenido para ser interrogado después de otro allanamiento en una casa cerca al lugar de la balacera.
El primer ministro Charles Michel convocó a los jefes de seguridad e inteligencia para una reunión de emergencia del consejo de seguridad nacional de Bélgica el miércoles para revisar el nivel de alerta del país y posibles medidas adicionales.
