Un cuarto quedo completamente reducido a cenizas, exactamente en el lugar conocido como «la casa de leña».
César Urbina es la persona que alquilaba este cuarto, que en cuestión de segundos fue consumido por las leguas de fuego, este refiere que no entiende como pudo haber sido provocado el siniestro, pues él no contaba con energía eléctrica, ni dejaba candela encendida para evitar este tipo de situación, que hoy le deja perdidas de al menos 20 mil córdobas ya que solo quedo con la mudada que viste.
Esta propiedad pertenece al señor Mario Campos, quien al momento del incidente no se encontraba, Los Bomberos de Masaya trabajaron más de media hora para atender la emergencia y controlar la situación en su totalidad.