Al menos 30 personas murieron ayer por el derrumbe de un edificio de cinco plantas en Lagos, la mayor ciudad de Nigeria, informó hoy la Agencia Nacional de Gestión de Emergencias (NEMA).
El portavoz de la NEMA, Ibrahim Farinloye, explicó al diario PM News que aunque en un primer momento se informó de que había diez muertos, en las últimas horas los servicios de rescate han recuperado más cadáveres de entre los escombros.
La cifra de víctimas mortales se sitúa ahora en los 30, aunque no se descarta que pueda aumentar debido a que los equipos de emergencia siguen trabajando en la zona, donde han conseguido rescatar con vida a trece personas.
El suceso ocurrió ayer sobre las 4.00 hora local (3.00 GMT) en el barrio de Lekki, cuando el edificio se vino abajo por motivos que todavía se desconocen.
Las autoridades nigerianas ya han abierto una investigación para esclarecer lo sucedido y, de momento, han arrestado al contratista del edificio para ser interrogado.
Según relataron algunos testigos a los medios locales, el edificio estaba en obras, por lo que las fuertes lluvias de los últimos días podrían haber afectado a la estructura del inmueble.
El derrumbe de edificios es bastante común en zonas populares de Lagos, en el suroeste de Nigeria, que sufrió uno de los peores accidentes de estas características en septiembre de 2014, cuando 80 personas murieron tras venirse abajo un inmueble que albergaba una popular iglesia evangelista.