Al menos cuatro personas fallecieron el martes en la región andina de Puno, sureste de Perú, tras la caída de una avalancha de piedra y lodo. Las fuertes lluvias que llegan con el fenómeno de El Niño provocaron la desgracia, informó el gobierno.
Las labores de rescate son coordinadas por el Centro de Operaciones de Emergencia del Fenómeno El Niño (COE-FEN) que alberga a 14 instituciones de varios ministerios, organizadas para enfrentar los embates de la naturaleza.
La avalancha que cayó sobre la localidad de Nueva Fortuna, en el distrito de Phara, frontera con Bolivia, también bloqueó algunas de las vías de la zona, detalló la policía.
El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) reveló el lunes del reciente fallecimiento de dos personas y de unas 2.625 familias afectadas, además de carreteras inundadas a causa tanto de la temporada de lluvias en el país como de los efectos de El Niño.
Las fuertes lluvias que caen en los Andes han provocado el debilitamiento de montículos de tierra en los cerros, lo que favorece aludes y desborde de ríos.
Las inundaciones también están afectando ciudades a lo largo de la franja costera peruana, como Tumbes (norte) y Arequipa (sur) y en algunas regiones andinas de Perú.
En 1982-1983, las inundaciones y sobre todo las epidemias a causa de El Niño dejaron 9.000 muertos en Perú, y el PIB cayó 11,6%. En 1997-1998 se registraron 500 muertes y una caída del PIB de 6,2%.