Al menos doce niños indígenas murieron en Perú tras ser mordidos por murciélagos hematófagos infectados de rabia entre septiembre y febrero en dos comunidades nativas de la amazónica región Loreto, frontera con Ecuador, informó el miércoles el ministerio de Salud. «Por los síntomas y los reportes médicos se determinó que los doce niños de dos comunidades de la etnia Achuar murieron por un brote de rabia silvestre», dijo a la AFP el director de Salud en Loreto, Hermann Silva.
«Las víctimas fueron mordidas por murciélagos hematófagos, animales que se alimentan de sangre, en las comunidades de Yankuntich y Uncun en la selva de la región Loreto, 1.100 kilómetros al norte de Lima, indicó el especialista.
Los menores fallecidos tenían entre 8 y 15 años de edad. Los decesos ocurrieron entre septiembre del 2015 y febrero, según las autoridades sanitarias.
El último menor fallecido se reportó este miércoles en el hospital Regional de Loreto.
«Hemos conversado con los Apus (autoridades nativas) y ellos nos reportaron que la comunidad creía que la muerte de estos niños se debía a brujería, es por eso que no nos informaron a tiempo del brote de rabia«, indicó Silva, quien viajó a ambas comunidades achuares ubicadas en la provincia Datem del Marañón en la frontera con Ecuador.
Silva informó que brigadas de vacunación han sido enviadas de urgencia para atender a las poblaciones afectadas que viven en zonas remotas a las que se llega tras viajes de varias horas por los ríos de la selva o en helicóptero.
«Estamos enviando siete mil dosis de vacunas para aplicar a la comunidades nativas», indicó el médico.
Por su parte, el gobernador de la región Loreto, Fernando Meléndez, pidió al gobierno del presidente Ollanta Humala que declarara la emergencia sanitaria en su región.
El viceministro de Salud, Percy Minaya, dijo a la prensa que era inminente la declaración de emergencia.
Las autoridades recomendaron a los pobladores no atrapar murciélagos ni ingresar a las cuevas que puedan servir de refugio a estos animales.
El último caso de rabia humana registrado en Loreto, también por mordeduras de murciélagos, se produjo en junio de 2015.