Unas 20 manzanas de maleza fueron arrasadas por un voraz incendio originado al costado noroeste del empalme de la Cuesta El Plomo, causado, supuestamente, por cazadores de garrobos.
Las infernales lenguas de fuego se alzaban a casi unos tres metros de altura y amenazaban con propagarse a una empresa de telecomunicaciones y una gasolinera cercanas al sitio, por lo que, rápidamente se movilizaron dos unidades contra incendio de la Dirección General de Bomberos y dos del Benemérito Cuerpo de Bomberos para controlar el fuego. Controlar las llamas les demandó una hora de intenso trabajo a los apagafuegos.