La tempestad que azota varios países europeos, con vientos de hasta 155 km/h, dejó dos heridos en París este lunes, mientras que en el Reino Unido una persona está desaparecida desde el domingo y en Alemania dos ciudades tuvieron que cancelar los desfiles de carnaval. En París, una señal de tránsito se desprendió con las ráfagas de viento y golpeó a una pareja de transeúntes.
La mujer, una joven de 20 años, está en coma y su vida corre peligro.
En el Reino Unido, las costas del sur y de Gales eran azotadas por intensas lluvias y por vientos de hasta 155 km/h.
Las autoridades decidieron imponer el estado de alerta, cerrando carreteras y el servicio de trenes y de ferries fue interrumpido. Unas 5.000 viviendas estaban privadas de electricidad.
En la ciudad costera de Penzance, en el suroeste, un hombre de 54 años está desaparecido desde el domingo, cuando se disponía a ayudar a unas aves marinas que estaban atrapadas en unas rocas.
Además las autoridades emitieron una alerta por inundaciones en 250 localidades.
En Alemania, los desfiles de carnaval fueron anulados el lunes en Düsseldorf y Maguncia (oeste de Alemania) en previsión de los violentos vientos anunciados, indicaron los organizadores.
La decisión fue tomada «con el corazón triste, pero con el sentimiento de que es la buena decisión», dijo Richard Wagner, presidente de la Asociación del carnaval de Maguncia en un comunicado.
En cambio, el principal y más antiguo carnaval de la región, el de Colonia, fue mantenido, pero con una serie de precauciones. Se prohibieron las grandes banderas y carteles y los personajes de cartón de gran tamaño, así como los caballos.
En las costas del oeste y del noreste de Francia, la tempestad arreciaba también, con vientos de hasta 140 km/h y olas inmensas, que dejaron a unas 14.000 personas sin electricidad.
Todas las conexiones marítimas entre Brest (Bretaña, oeste) y el Reino Unido fueron interrumpidas, y la circulación en los puentes fue limitada a 50 km/h.
En el Mont Saint-Michel, uno de los más visitados monumentos de Francia, se prohibió la circulación por el puente que une el peñón en el que se encuentra la abadía con el continente. La abadía permanecerá cerrada hasta el martes.
Los vientos «van a generar y mantener olas muy fuertes», que «van a ampliarse progresivamente el lunes», a lo que hay que agregar el riesgo de elevación del mar a raíz del fuerte coeficiente de marea, explicó el servicio meteorológico francés.
Esta conjunción de fuerte oleaje y de alto coeficiente de marea podría «generar, sobre todo en el momento de pleamar, inundaciones en las partes expuestas o vulnerables del litoral», agregó.