Con fe y devoción centenares de Masayas, se dieron cita en la parroquia Nuestra Señora de la Asunción para celebrar al niño Dios del pueblo. Niños y niñas en distintos barrios de la ciudad y en compañía de sus padres se reúnen para recorrer las calles vestidos de pastorcitos, hasta llegar a la basílica menor en el parque central de la ciudad, asistiendo a la solemne misa y luego la procesión que culmina en en horas de la madruga en el histórico y tradicionalista barrio de Monimbo.
Como parte de la tradición de los reyes magos se recorren las calles regando caramelos y llevando la alegría a los niños y niñas.