Un policía puertorriqueño que presuntamente asesinó a balazos a tres de sus colegas en la sureña ciudad de Ponce ingresó a prisión la noche del sábado. Esto se delimitó al no pagar la fianza de 11,3 millones de dólares que un tribunal le impuso en espera del juicio.
El Departamento de Justicia de Puerto Rico informó en un comunicado que la audiencia preliminar contra el oficial Guarionex Candelario Rivera se realizará el 14 de enero.
La tarde del sábado, Candelario Rivera fue dado de alta del hospital en San Juan donde se encontraba internado debido a heridas que sufrió durante un tiroteo en el que tres de sus compañeros murieron baleados el 28 de diciembre. Después de su salida del hospital fue trasladado de inmediato a un tribunal de Bayamón.
La jueza Jessica Morales «luego de escuchar las pruebas, encontró causa probable en cada uno de los delitos», informó el fiscal de Ponce, Richard Rosado Jiménez, en un video difundido por el periódico El Nuevo Diario.
La fiscalía presentó 11 cargos contra Candelario Rivera, entre ellos tres por asesinato en primer grado, detalló el Departamento de Justicia.
Candelario Rivera, de 50 años de edad y 19 de servicio policial, enfrenta cargos por la muerte a balazos el pasado 28 de diciembre del comandante Frank Román, la tenienta Luz Soto Segarra y la policía Rosario Hernández De Hoyos en una comisaría de Ponce, en la costa sur de la isla.
Las autoridades informaron originalmente que, tras ausentarse del trabajo durante gran parte de diciembre con un justificante médico, Candelario Rivera llegó el lunes pasado a la oficina y tomó como rehenes a sus compañeros para exigir hablar con el supervisor del departamento y luego les disparó.
