Este es el escrito que comparte la diseñadora alemana Viva Penz sobre el viaje que hará a Nicaragua pero hasta dar a luz a su tercer hijo, que traerá con ella.
A finales de 2017 tenía una duda acerca de visitar o no Centroamérica. Varios de mis amigos acá en Alemania me habían contado acerca de lo maravillosa que es esa zona del continente americano.
Por eso decidí realizarle entrevistas a varios de ellos que habían visitado ese hermoso lugar, empezando por los dos más experimentados Lev y Joules, que habían visitado todos los países.
Comentaron cosas bonitas acerca de Costa Rica y Guatemala, así como de los demás, sin embargo yo necesitaba algo que despertara verdaderamente mi interés por viajar hacia ese lugar, sobre todo con mis vacaciones a punto de iniciar y con la plata en la mano lista para comprar mi boleto.
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Lo que me decían sobre esos países era verdaderamente atractivo pero ya lo había escuchado de otras tierras en Europa y en Asia, por eso es que les pedí me dijeran algo diferente, y fue así como tomé la decisión de visitar Centroamérica pero por lo que me contaron acerca de Nicaragua.
De inmediato llamé a mi agente de viajes y pregunté acerca de Nicaragua, sorprendiéndome con lo más favorable que es ese país en cuanto a costos y en paisajes que mi agente amablemente me mostró en los itinerarios que otras operadoras de turismo tenían allí.
Sin embargo, no he podido viajar a Nicaragua porque una semana antes de viajar descubrí que estaba embarazada. Es por eso que decidí suspender esa aventura porque lo haré más adelante ya con mi bebé en brazos.
Desde entonces he estado viendo muchos vídeos sobre las zonas turísticas de Nicaragua, sobre todo las zonas rurales que son las que más me interesan para conocer, pues mis amigos me contaron muchas cosas hermosas sobre el calor de las familias nicaragüenses, su comida, sus costumbres y ese bonito sentimiento que ellos tienen de regresar algún día.
Aún no he llegado, y ya quiero regresar.
