Día a día en internet se escriben millones de cosas acerca de la alegría que le provoca a los extranjeros países en desarrollo y con impresionante potencial turístico como Nicaragua.
Este país ha aparecido en innumerables publicaciones como ideal para la inversión y hasta para que se puedan retirar en alguno de los departamentos con ciudades apacibles y cálidas.
Incluso, cuando se trata de tiempos difíciles, los extranjeros mantienen su fe y confianza en esta tierra que les brinda todas las condiciones para empezar de nuevo.
Eso es lo que encontramos en el relato de la escritora Jess Brown para la página web wilderwomen.com.
En su escrito menciona que Nicaragua sigue siendo el mejor lugar para invertir y que todos sus planes se mantienen en pie, ya sea para visitar el país a manera de turista y para meditar acerca de posibles inversiones.
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“Después de meditar me di cuenta que las preocupaciones de mi padre se debían a que de esa manera me decía que me ama y que quiere que regrese a casa a salvo… Por eso que para no quedarme con las enormes ganas de conocer Nicaragua dejé atrás mis dudas y confié en el Universo… Dos aviones, un taxi, un microbús y ya estaba en Granada, Nicaragua… Mi consejo para todos es que cuando se quiere viajar para conocer un lugar así de hermoso no podemos dejar que nada nos detenga”; menciona Brown en su relato.
Jess es una de esas chicas extranjeras que se aventura en una nación humilde que no conoce para experimentar desde lo más humilde de las calles hasta lo más exótico de las playas con una mochila enorme en su espalda.
En su escrito ofrece consejos para que otros extranjeros los implementen cuando visiten Nicaragua: “Lean libros de viajes sobre el destino, acerca de los buses, víveres, comidas, bebidas, excursiones y tours. Preparen una hoja de actividades para determinar el presupuesto máximo.
"Hagan lo que sea necesario para ahorrar dinero antes de emprender el viaje y asegúrense de dejar algo disponible para cuando regresen a casa”, agrega.
“Una vez adquieras el compromiso con tu plan de acción y la aventura esté preparada, deja de pensar tanto y solo hazlo”; finaliza.
