No son ajenas para nadie en el país y fuera de él, las decenas de publicaciones que desde afuera se dan para expresar cómo se admira a Nicaragua. En definitiva, se trata de una nación con muchísimos atractivos para priorizarla en la agenda de viajes de cualquier aventurero.
En esta ocasión, hemos recibido una nueva pieza de nuestra amiga canadiense Karolyn Masters, que ha visitado Nicaragua y que también ha hecho negocios sobre propiedades exquisitas para el inversionista extranjero.
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De tantos lugares que ha visitado, le preguntamos cuál ha sido su favorito; y esto fue lo que nos contestó:
He tenido el placer de visitar Nicaragua un par de veces y en ambas ocasiones la hemos catalogado como nuestras vacaciones favoritas.
Nicaragua es hermosa en sus paisajes y en la calidad de su gente. Las vistas al océano lo pueden dejar a uno sin aliente siempre, y la gente toca tu corazón con su apertura, su calidez y su amabilidad.
Lo que más me gusta de Nicaragua es que yo amo estar cerca del mar y me gusta también surfear, y es por eso que sus playas están de primer lugar en mi lista. La cultura y la naturaleza también me han impactado mucho. En mis visitas a Nicaragua me he hospedado en Gran Pacifica, y allí se contrató para mí a una hermosa mujer llamada Perla, que me ayudó y enseñó a cocinar y también a cuidar a mis niños durante toda nuestra aventura.
Ella no habla inglés y todo lo que hablaba consistía en simples “hola” y “gracias”, pero a pesar de su carácter apacible, disfrutamos mucho su compañía y todo lo que aprendimos de ella y de su cultura. Lo que más me enamoró de ella fue su inmediato cariño hacia mis hijos y de ellos para ella, especialmente de mi hijo, que es diagnosticado con autismo. Él sintió su aceptación y rápidamente se sintió en confianza con ella.
Acerca del potencial de Nicaragua, he visto que en los pasados cinco años, desde el ejemplo del crecimiento de Gran Pacifica, que hay muchas mejoras en infraestructura. Esto me da mucho gusto verlo.
Si me preguntan si me gustaría visitar Nicaragua de nuevo, les diría que definitivamente. De hecho, estoy planeando mi siguiente viaje, espero en Dios, para el próximo año.
