Nicaragua es un país que cuenta con muchas mujeres que cuentan con una creatividad y pasión por el arte envidiable, logrando así cosechar éxitos y reconocimiento por parte del público que sabe apreciar que en nuestro país existe talento.
Aquí les dejamos tan solo unos ejemplos de muchos que hay sobre mujeres que decidieron vencer sus miedos, romper esquemas y empoderarse para seguir sus sueños artísticos.
Tesalia Cáceres – Danza
Tesalia es una joven que se ha vuelto en una apasionada de la danza folclórica y sobre todo del flamenco. Desde los 8 años su madre le inculcó las artes y como su abuelo tiene descendencia española siempre estuvo rodeada de raíces mestizas, teniendo así inspiraciones artísticas de España y Nicaragua.
Aprendió danza con el célebre Heriberto Mercado para luego seguir sus estudios de forma independiente, guiada por «la sed de querer aprender más y sacar mi propio estilo», comenta a tn8.tv.
«Yo como mujer me siento muy orgullosa y feliz de expresarme intensamente en el flamenco ya que el flamenco en sí es un baile de admiración y respeto mundial», señala esta joven que se ha dedicado de lleno a practicar la danza en nuestro país, de donde obtiene ingresos para poder vivir haciendo lo que más ama en la vida.
María José Ocarina – Música
María José Ocarina es una verdadera maestra de la música en Nicaragua. No solo se ha vuelto en una referencia de la percusión y la marimba en nuestro país, también ha incursionado en el rock nacional con La Cegua y Mafia Funk.
Ella desde los 6 años se empapó de la danza y la música en Masaya (sus padres eran bailarines tradicionales), por lo que los escenarios no le son extraños. Luego de los 17 años se dedicó más a la percusión y eventualmente se convertiría en profesora de batería y otros instrumentos que también maneja.
«En Nicaragua no es costumbre ver a una mujer en la batería o instrumentos de percusión, los que socialmente están más vinculados al hombre», explica Ocarina, quien se dedica a dar clases de música y con lo que ha alcanzado un respeto en el gremio sin distinción de género, sino por su capacidad y talento. «Me gusta mucho enseñar, compartir lo que sé con mucha paciencia y calma, dejando los pilares para que mis alumnos avancen más», agrega.
Lula Mayorga – Literatura
En literatura nicaragüense existen muchos casos de personas que se dedican a los versos y poemas, pero no es tan común encontrar alguien que se dedique de lleno a la literatura infantil.
En ese apartado nos encontramos con Lula Mayorga, escritora que ya ha publicado un cuento llamado Mi Gato Mostacho en 2014 y además un álbum ilustrado con el título Punto Dulce, en 2017.
El talento de esta joven llega a tanto que imparte talleres de creación de Creación Literaria en una universidad de Managua. Ella se toma su tiempo para producir nuevas creaciones y busca que tengan un estilo que no se enfoque directamente en lo pedagógico, sino que también los adultos logren apreciar y aprender de historias distintas.
Ceshia Ubau – Canto
Ceshia es una mujer sumamente dulce, amable y tierna con el trato a los demás según expresa la gente que la conoce. Ese mismo calor humano se le escucha en su cantar, en su habilidad de canalizar sentimientos en una prodigiosa voz que la convierte en una de las cantautoras nicaragüenses más importantes del país.
En su infancia aprendió piano clásico y actualmente está metida en el jazz, absorbiendo todas las corrientes musicales que le proporcionan combustible para dar marcha a su carrera artística. Así mismo se ha familiarizado con la literatura al escribir poemas, los que servirían de inspiración para las canciones que ha realizado con su primer disco «Con los Ojos del Alma«, donde también toca guitarra.
Ceshia considera que en Nicaragua aún falta superar dificultades a las mujeres que están en la música, «empezando por que tomen tu trabajo y tus propuestas en serio (…) A la mujer siempre se le ve usualmente como intérprete o bailarina de alguna banda en un escenario, así que estudiando y con el trabajo de una misma debe abrirse paso en este medio y defender lo que propone», explica Ubau.
Verónica Granados – Pintura
La pintura en nuestro país es un arte que va tomando auge poco a poco, sobre todo por la era digital en la que nos encontramos donde es más fácil ahora promocionar las creaciones a través de esta herramienta de comunicación.
Así es como Verónica Granados, originaria de Diriomo, es común que diversos medios nacionales la entrevisten para conocer más de ella, ya que sus obras han dejado críticas muy positivas por el empeño que deposita en cada una.
«Desde los 8 años tenía el sueño de ser pintora, a esa edad de manera autodidacta empecé la práctica en casa con dibujos animados y tareas de la escuela. Desde esa edad he practicado el dibujo perfeccionando a base de práctica y práctica», explica Granados, agregando que la posición que tiene ahora es gracias a años de esfuerzo, «de lucha, de romper esquemas y miedos al no puedo o al no tengo. (Mis pinturas) reflejan la libertad de una artista».
Pilola Osorno – Teatro
Pilola es una mujer que su corazón se llena de teatro, una de las artes más interesantes que hay y quizás una de las que menos focos se tiene en nuestro país, pero que de a poco va agarrando un nuevo auge gracias a sangre joven.
Pilola adjudica su pasión al teatro a que desde sus 3 años ya hacía performance en reuniones familiares, en donde la alentaban a que continuara con ese ímpetu creativo. Además en su árbol familiar han habido muchos escritores y poetas, por lo que en sus venas corre el talento artístico.
Debido a ese impulso interno de poder hacer interpretaciones y encarnar a distintos personajes es que ya ha hecho obras en espacios como el Teatro Nacional Rubén Darío, así como participar en el cortometraje nicaragüense «Cada Quien Por Su Cuenta«.
«Aún falta en nuestra sociedad sembrar la semilla de la pasión por el arte y lo más irónico es que vivimos en un país de artistas», comenta Pilola, aunque se mantiene optimista al considerar que «el desarrollo tecnológico va a impulsar a muchas personas talentosas a desempeñarse mejor y darse a conocer, tanto actores como directores».
Y muchos ejemplos más…
En Nicaragua existe una gran cantidad de mujeres que se están dedicando al arte en sus diferentes formas.
Tenemos cineastas que cada vez van desarrollando más el arte audiovisual con cortometrajes y algunas que ya vienen pensando en los largometrajes. En Fotografía si asisten a conciertos de rock verán que hay muchas que están metidas de lleno en esto, además hay muchas que saben de fotografía y lo aplican para uso de publicidad o bien para fotografías artísticas.
Un aspecto que debido al entorno tecnológico y digital de la era en que vivimos ha venido creciendo en gran manera, es el diseño gráfico o la ilustración como tal, en donde hay muchas mujeres jóvenes que se están luciendo con sus obras y algunas hasta se vuelven virales por el agrado que generan en el público en general.
La lección que debe quedar entonces es que aunque todavía existan retos por superar las mujeres no deben dejarse vencer ante la adversidad, tienen que confiar en su talento y demostrarlo, para que así el arte en nuestro país pueda seguir creciendo y que cada vez hayan más personas que se sumen a compartirlo.