Los síntomas vinculados a la variante de Covid-19, identificados recientemente por la Organización Mundial de la Salud (OMS), incluyen ansiedad y dificultades para conciliar el sueño. La OMS sigue de cerca la evolución de los casos en todo el mundo.
Esta nueva mutación, conocida como JN.1, surgida de la variante BA.2.86, ha emergido como la predominante en Estados Unidos en cuestión de meses, siendo responsable del 44 por ciento de las infecciones en dicho país; según estadísticas de los Centros de Control de Enfermedades.
Dada su virulencia, la OMS hace un llamado a mantener la precaución y no bajar la guardia frente a las medidas preventivas para evitar la propagación del virus que desencadenó la pandemia global.
Los síntomas asociados a la nueva variante del Covid JN.1
Según el Sistema Nacional de Salud del Reino Unido, la Covid-19 se suma a las enfermedades estacionales como la influenza y la gripe en los países del hemisferio norte, instando a adoptar precauciones adicionales.
Además de los síntomas comúnmente asociados a la infección por Covid-19, como secreción nasal, fiebre, cansancio y fatiga, la variante JN.1 presenta características inusuales. Según la OMS, los pacientes afectados por esta variante informan de problemas para conciliar el sueño y episodios de ansiedad; síntomas que no se habían considerado previamente relacionados con la infección.
Contrariamente, las personas infectadas con JN.1 no suelen experimentar pérdida de gusto u olfato, un síntoma frecuente en algunas variantes previamente reportadas.
Adicionalmente, los Centros de Control de Enfermedades de Estados Unidos indican que esta variante puede provocar malestar durante dos o tres días, aunque sigue siendo motivo de especial atención en poblaciones vulnerables como personas de la tercera edad, niños o aquellos con enfermedades preexistentes.
Entre las medidas que pueden ayudar a prevenir la infección con esta nueva variante se encuentra la aplicación de vacunas de refuerzo, las cuales podrían proporcionar una protección adicional.
Según los especialistas, al provenir de un linaje de virus para los cuales ya se han desarrollado vacunas; la aplicación de refuerzos disponibles contribuirá a prevenir la infección y, en caso de ocurrir, a reducir su gravedad. No obstante, se recomienda buscar atención médica en caso de presentar síntomas.