Si estás cansada de presentar alergias o asma, déjanos decirte que a nivel mundial la cantidad de personas que presenta algún tipo de alergia alcanza el 30%. Ante esto se abre la pregunta ¿hay alguna relación entre las alergias y los smartphones? Todo parece indicar que sí.
Al menos esa es la conclusión a la que llegó la estudiante Hana Ruran, con un proyecto de ciencias que se presentó en la Reunión Científica Anual del Colegio Estadounidense de Alergias, Asma e Inmunología. La conclusión fue que los móviles a menudo están cargados de alérgenos, bacterias y hongos de perros y gatos.
«Siempre tengo mi teléfono conmigo, explica Ruran. Lo uso constantemente. Al mismo tiempo tengo muchas alergias y quería saber si había alguna relación»
Para evaluar esto, la investigadora creó modelos de teléfonos que tenían un tamaño y una superficie similares a los de uno real y se recolectaron muestras de 15 voluntarios para medir los niveles de alérgenos, endotoxinas y betaglucanos o BDGs.
Relación con las alergias o el asma
Los beta-glucanos son moléculas que se presentan como celulosa en las plantas, el salvado de los granos de cereales como la cebada y avena, algunos hongos, setas y bacterias; y que se caracterizan por su capacidad para modular el sistema inmunitario. De ahí la relación con las alergias o el asma.
Los teléfonos mostraron niveles elevados y variables de BDGs y endotoxinas, y se encontraron alérgenos provenientes de gatos y perros en aquellos que tenían mascotas en el hogar.
«Los BDGs se encuentran en las paredes de las células fúngicas, y se han encontrado en muchos entornos y superficies que causan síntomas irritantes y crónicos en las vías respiratorias; añade Ruran, lo que les convierte en un marcador constante para estudiar el moho problemático.
Las endotoxinas por su parte, son un potente agente inflamatorio y un marcador de exposición a bacterias gramnegativas. Que son aquellas que pueden causar infecciones graves, como: neumonía, peritonitis, infecciones de las vías urinarias, del torrente sanguíneo; infecciones en la herida o el sitio quirúrgico y meningitis.