El asma es una afección en la que las vías respiratorias se estrechan e hinchan, lo que puede producir mayor mucosidad. Esto puede dificultar la respiración y provocar tos, un silbido (sibilancia) al exhalar y falta de aire.
#SabíasQue | Hoy se celebra el Día Mundial del Asma, un evento organizado por GINA (Iniciativa Global para el Asma).
Esta efeméride se celebró por primera vez el 5 de mayo de 1998 #DíaMundialdelAsma. pic.twitter.com/NEExGkrVuC
— TN8 Nicaragua (@canaltn8) May 5, 2021
Para algunas personas, el asma es una molestia menor. Para otras puede ser un problema considerable que interfiere en las actividades cotidianas y que puede producir ataques de asma que pongan en riesgo la vida. Así informó Mayo Clinic.
El asma no tiene cura, pero sus síntomas pueden controlarse. Dado que el asma suele cambiar con el tiempo, es importante que colabores con el médico para hacer un seguimiento de los signos y los síntomas y ajustar el tratamiento según sea necesario.
Síntomas
Los síntomas del asma varían según la persona. Es posible que tengas ataques de asma con poca frecuencia, síntomas solamente en ciertos momentos, como cuando haces ejercicio, o síntomas en todo momento.
Falta de aire
Dolor u opresión del pecho
Sibilancias al exhalar, que es un signo común de asma en los niños
Problemas para dormir causados por falta de aliento, tos o sibilancia al respirar
Tos o sibilancia al respirar que empeora con un virus respiratorio, como un resfriado o gripe
Causas
No está claro por qué algunas personas contraen asma y otras no; sin embargo, es probable que se deba a una combinación de factores ambientales y heredados (genéticos).
La exposición a varios irritantes y a sustancias que desencadenan alergias (alérgenos) puede provocar signos y síntomas.
Los desencadenantes varían de una persona a otra y pueden incluir los siguientes:
Alérgenos aerotransportados, como el polen, los ácaros del polvo
Infecciones respiratorias, como un resfriado común
Aire frío
Contaminantes del aire e irritantes, como el humo
Tratamiento
La prevención y el control a largo plazo son la clave para detener los ataques de asma antes de que comiencen.
El tratamiento suele consistir en aprender a reconocer los factores desencadenantes, tomar medidas para evitarlos y hacer un seguimiento de la respiración para asegurarte de que los medicamentos mantienen los síntomas bajo control. En caso de un ataque de, es posible que tengas que utilizar un inhalador de alivio rápido.
