Las enfermedades de transmisión sexual (ETS), o infecciones de transmisión sexual (ITS), generalmente se adquieren por contacto sexual. Los organismos (bacterias, virus o parásitos) que causan las enfermedades de transmisión sexual pueden transmitirse de una persona a otra por la sangre, el semen o los fluidos vaginales y otros fluidos corporales.
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En ocasiones, estas infecciones pueden transmitirse de forma no íntima, como de madre a hijo durante el embarazo o parto, o a través de transfusiones de sangre o agujas compartidas.
Estas enfermedades no siempre presentan síntomas. Es posible contraer enfermedades de transmisión de personas que parecen estar perfectamente sanas y que ni siquiera saben que tienen una infección.
Síntomas de una enfermedad sexual
Las (ETS) o las infecciones de transmisión sexual (ITS) pueden tener diversos signos y síntomas, incluso la ausencia de síntomas. Es por eso que pueden pasar desapercibidas hasta que ocurren complicaciones o hasta que se diagnostica una pareja. Los signos y síntomas que pueden indicar una infección de transmisión sexual incluyen los siguientes:
Llagas o protuberancias en los genitales o en la zona oral o rectal
Dolor o ardor al orinar
Secreción proveniente del pene
Flujo vaginal inusual o con olor extraño
Sangrado vaginal inusual
Dolor durante las relaciones sexuales
Dolor e inflamación de los ganglios linfáticos, particularmente en la ingle, aunque a veces más extendidos
Dolor en la parte inferior del abdomen
Fiebre
Erupción en el tronco, las manos o los pies
Los signos y síntomas pueden aparecer unos días después de la exposición, o pueden pasar años antes de que tengas algún problema perceptible, según cada organismo.
Cuándo consultar al médico
Acude a un médico inmediatamente en estos casos:
Eres sexualmente activa y podrías haber estado expuesta a una infección.
Tienes signos y síntomas de una infección de transmisión sexual.
Programa una consulta con un médico en estos casos:
Cuando consideres comenzar la actividad sexual o cuando tengas 21 años, lo que ocurra primero.
Antes de comenzar a tener relaciones sexuales con una nueva pareja.