¿Workaholic? ¿Conoces esa pequeña voz en tu cabeza que dice que tu trabajo te está matando? Podría estar en lo correcto: una nueva investigación encontró que la adicción al trabajo aumenta significativamente las posibilidades de sufrir un derrame cerebral.
El equipo médico de la UCL Epidemiology & Public Health descubrió que este tipo de comportamientos podrían ser una de las causas que genera afecciones en la salud de cientos de trabajadores, ya que al someterse a la presión de cubrir todas sus labores diarias, el organismo se ve forzado a trabajar.
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Con un estudio realizado a 800 hombres y mujeres de Estados Unidos, Australia y algunos países de Europa, estos expertos publicaron en la revista The Lancet, una serie de resultados que impactó a la mayoría de los participantes.
En quienes confesaron una mayor adicción a su trabajo, las probabilidades de padecer un derrame cerebral aumentaron hasta un 33%, descubriendo que estas personas pasaban hasta 55 horas a la semana trabajando.
A este factor se sumaron otros elementos como problemas con malos hábitos alimenticios, insomnio, consumo de alcohol y falta de ejercicio, lo que se refleja en padecimientos y enfermedades como la obesidad, la presión arterial alta el tabaquismo y la ansiedad.
Aunque algunos consideran una adicción al trabajo casi una cualidad, lo cierto es que laborar más del tiempo debido puede generar graves problemas en la salud.
Los investigadores encontraron un patrón claro de que cuanto más tiempo trabajes, mayor será el riesgo de accidente cerebrovascular y enfermedad cardíaca, incluso teniendo en cuenta otros factores de riesgo conocidos, como:
Edad
Sexo
Estado socioeconómico
Quienes trabajan más de lo normal y comienzan con problemas de salud generados por el estrés, están trabajan para pagar el médico. Todo con medida siempre. Y tú, ¿eres trabajólico?