A la hora de utilizar un baño público, una gran parte de nosotros coloca papel sanitario en el asiento del inodoro para evitar tener contacto directo.
Ahora bien, por más que esta práctica parezca ser la más idónea para cuidar nuestra salud y evitar contraer infecciones, deberíamos abandonarla.
Por qué deberías dejar de poner papel en el asiento del inodoro
Tal como explica Insider, el papel sanitario está diseñado para absorber, lo que implica también absorber todos los gérmenes y bacterias peligrosas que, por un motivo u otro, entran en contacto con el papel higiénico, recomienda el sitio web VIX.
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Por otro lado, los asientos de la mayoría de los baños públicos, gracias al material y a la forma en que están diseñados, evitan la proliferación de bacterias y otros microorganismos.
Por esta razón, colocar papel sanitario en el asiento del inodoro en lugar de protegernos, en realidad, invita a entrar a más gérmenes a nuestro cuerpo.
En definitiva:
1. No coloques papel higiénico en el asiento del inodoro.
2.Evita utilizar el papel sanitario de los baños públicos (sobre todo cuando está descubierto) ya que puede recibir todas las salpicaduras del inodoro.
3. Procura siempre lavar bien tus manos con agua y jabón antes de salir del baño.
Otro error que solemos cometer es que muchos de nosotros hemos, pero es muy importante que dejemos de hacerlo por cuestiones de salud. ¡Jamás vuelvas a bajarle a la cadena del inodoro con la tapa abierta!
Así como no sabes cuántas estrellas hay en el cielo, tampoco tienes idea de cuántas bacterias hay en la taza del inodoro. Según un estudio publicado en el diario de Applied Microbiology, muchas bacterias y virus se quedan en el agua del sanitario después de que le jalas a la palanca. No importa si lo haces más de una vez.