Las dietas son un habito que muchas personas suelen emplear cuando observan que su peso corporal ha aumentado y llegan hasta el punto de sufrir estrés por su apariencia. Es posible adelgazar sin sufrir demasiado con el apetito, siempre y cuando se adopte una dieta balanceada. Y, para eso, el consumo de proteínas es vital.
Las proteínas aplacan el hambre y adelgazan
Las proteínas son fundamentales para la pérdida de peso porque evitan que tengamos hambre constantemente, pues proporcionan saciedad y exigen más gasto energético por parte del cuerpo para procesarlas, con lo que quemamos más calorías en estado de reposo.
Además de eso, alimentos que son fuentes de proteínas contribuyen a la formación de los músculos y al buen funcionamiento de los sistemas nervioso e inmunológico. Para obtener todos estos beneficios, es importante aprender a consumir el nutriente de la manera adecuada, pues, en exceso, puede causar daños al organismo.
Cómo comer proteínas en todas las comidas del día
Proteínas para el desayuno: en la primera comida del día es posible obtener una buena dosis de este nutriente a través de huevos, avena, yogures, leche de soya, quesos bajos en grasas, como el queso fresco o el cottage, por ejemplo, o un paté hecho de ricota y pollo desmenuzado.
Proteínas para un bocadillo: antes del almuerzo, una tostada con mantequilla de almendras o de maní evita que exageremos.
Proteínas para el almuerzo: pollo, carnes rojas, ensalada con quinua o semillas de chía o de linaza, frijoles y una porción de tofu pueden hacer parte de un menú capaz de mantenernos satisfechos por mucho tiempo.
Proteínas para el tentempié vespertino: para evitar que tengamos mucha hambre por la noche, podemos apostar en opciones como castañas, en cantidad moderada, o un yogur con frutas.
Proteínas para la cena: pescados, pavo, lentejas, arvejas, ensaladas con remolacha, combinados en diversas maneras y modos de preparación son sugestiones ricas en estos nutrientes y controlan el apetito hasta el día siguiente.
La cantidad ideal de proteínas para adelgazar
No existe una cantidad única y exacta de proteínas que deba ser consumida para bajar de peso, pues los valores pueden variar mucho según el individuo.
Quien practica ejercicios regularmente, por ejemplo, debe consumir 20 % de sus calorías diarias a través de proteínas. Personas que no practican actividades físicas, por otra parte, deberán consumir otro porcentaje, indicado por un profesional del área de la salud.
