Hay legumbres que suelen ser desconocidas por muchas personas, otras son conocidas pero de poco consumo por la población en general, por ejemplo el brócoli.
Muchas personas creen que no es rico, pero en realidad es un alimento indispensable en la dieta de cualquier persona. Este vegetal no solo puede quedar delicioso en muchas preparaciones, sino que trae muchos beneficios a la salud.
Estas son las razones por las que deberías comer brócoli todos los días:
1. Previene el cáncer
Los vegetales crucíferos como el brócoli, la coliflor y las coles de bruselas tienen propiedades capaces de prevenir el cáncer y fortalecer el sistema inmune.
2. Reduce el colesterol
El brócoli aporta los dos tipos de fibra: insoluble y soluble. La primera puede contribuir a combatir el estreñimiento y la segunda se disuelve en el agua para formar un gel en el sistema digestivo. De esa forma, el organismo no es capaz de absorber nutrientes como el azúcar y el almidón. Eso hace que los niveles de colesterol bajen, lo que ayuda a prevenir las enfermedades coronarias.
3. Fortalece los huesos
El brócoli tiene mucho calcio y vitamina K, dos nutrientes esenciales para la salud de los huesos y la prevención de la osteoporósis. Es ideal para niños, ancianos y madres que están lactando.
4. Es perfecto para la dieta
Tiene mucha fibra, y eso significa que podemos comerlo y sentirnos satisfechos durante más tiempo. Por otro lado, tiene muy pocas calorías y puede quedar delicioso en una ensalada de verdes.
5. Cuida la piel
Por si fuera poco, el brócoli también es un aliado a la hora de tener una piel saludable, en la medida en que contiene muchos antioxidantes y nutrientes como la vitamina C y zinc.
Más rico de lo que imaginas
Muchos crecen pensando que el brócoli es un alimento desagradable, pero puede ser muy rico una vez que aprendes a cocinarlo. Es un gusto adquirido para muchos pero, conociendo los beneficios para la salud que tiene, vale la pena hacer el esfuerzo por incorporarlo a tu dieta.
Puedes hacer que un sencillo brócoli se convierta en un plato delicioso con un poco de creatividad. Puedes rallarlo y mezclarlo con huevo y queso para hacer unos deliciosos muffins sin harina. También los puedes saltar en una sartén con manteca, ajo y almendras para tener un acompañamiento para la carne.