Llegó el momento de derribar el mito que la mayoría de las películas románticas ha generado. Luego de las relaciones sexuales no siempre la escena es la de una pareja abrazada, riendo y sintiendo la satisfacción de haber vivido juntos un gran momento de placer. Aunque no lo creas, en la vida real, también se puede dar un escenario totalmente distinto: el de la depresión ¡Sí, depresión!
Un estudio difundido por el International Journal of Sexual Health estableció que existe un fenómeno llamado Disforia postcoital, es decir, un sentimiento de tristeza después del orgasmo, en el que se experimenta una sensación de vacío y/o melancolía sin ninguna razón aparente.
La explicación de esta “depresión” está en las hormonas. Durante el sexo las dopaminas, endorfinas y oxitocinas trabajan en conjunto para hacerte llegar al máximo placer, sin embargo luego de este cóctel hormonal, todo vuelve a los niveles. Este regreso a lo normal provoca en algunas personas una sensación de tristeza.
Según este estudio, de un universo de 250 mujeres encuestadas, el 46% admitió haber experimentado una pena de este tipo al menos una vez en el mes anterior.Para saber enfrentarla, lo primero es analizar si estamos frente a un escenario de depresión generalizada o corresponde solo a una confusión producida por un hecho biológico.
También es muy importante que sepas que la depresión post sexo no tienen en ningún caso relación con si la relación sexual fue extraordinaria o no. Por lo mismo, la mejor forma de combatir la caída hormonal es ayudando al organismo a compensar de otra forma.
¿Cómo? La respuesta está en otro estudio relacionado, específicamente una investigación realizada por Matthew Killingsworth y Daniel Gilbert, de la Universidad de Harvard, que señala que el sexo no solo provoca felicidad por el acto físico, sino por la concentración que se logre en la actividad.
Los movimientos corporales intensos necesitan más grado de concentración, por lo tanto al compartir este momento en pareja, se está acumulando mayor nivel de satisfacción. Si logras esta conexión, no tendrás que preocuparte de la mala pasada que puedan provocarte las hormonas, pues tu alegría estará asegurada.