Las células diseñadas se distribuyen a través de los tejidos linfáticos y del tracto gastrointestinal, sitios anatómicos en los que persiste el VIH en las personas infectadas.
Una nueva terapia genética que rediseña las células madre formadoras de sangre podrían detectar, proteger y hasta destruir las células infectadas por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), reveló este viernes un estudio publicado en PLOS Pathogens.
El experimento realizado por científicos de la Universidad de California, en Estados Unidos (EE.UU.), a través de células T artificiales con receptor de antígeno quimérico que se apropia de la interacción esencial entre el VIH y la molécula CD4 de la superficie celular, logró destruir las células infectadas de varios monos y ratones de prueba.
"Estos hallazgos son los primeros que muestran que las células madre hematopoyéticas pueden ser modificadas con una terapia de receptores de antígeno quimérico, que se puede injertar de forma segura en la médula ósea y convertirse en células inmunológicas funcionales en todo el cuerpo", asegura el estudio de la universidad estadounidense.
Las células T con receptor de antígeno quimérico se han convertido en una poderosa inmunoterapia para varias formas de cáncer y han sido una promesa en el tratamiento del VIH.
Los investigadores esperan que la terapia logre reducir la dependencia de los individuos contagiados de los medicamentos antivirales, reducir el costo de la terapia y permitir la posible erradicación del VIH de los lugares en los que se esconde en el cuerpo.
En Contexto:
120.000 niños murieron por causas relacionadas al sida en 2016
Si esta tendencia se mantiene, para 2030 se registrarán al menos 3,5 millones de nueva infecciones por el VIH en adolescentes.
Unos 120.000 niños y niñas menores de 14 años perdieron la vida por enfermedades relacionadas con el sida, mientras que 18 se infectaron de VIH durante 2016, informó la Unicef.