La comunidad vinculada a la salud recomienda enérgicamente reducir el consumo de azúcares en la dieta. Algunos médicos y nutricionistas aconsejan incluso eliminar el azúcar refinada de los hábitos alimenticios y optar por otros tipos de azúcares o endulzantes naturales.
Si bien muchas personas conocen los efectos de este alimento en el organismo (mayores riesgos de sufrir problemas cardíacos, mayor tendencia a padecer sobrepeso, entre otros) se sabía muy poco sobre el impacto a nivel emocional. Pues, resulta que un estudio ha revelado que el azúcar refinada está estrechamente vinculada con síntomas de depresión, particularmente en los hombres.
Los hombres tendrían mayores riesgos
La investigación llevada adelante por científicos de la University College of London se centró en el análisis de un grupo de 5 mil hombres y otro de 2 mil mujeres. Durante los 5 años en los que duró el estudio se tuvieron en cuenta tanto la comida consumida como los cambios de humor.
Los datos observados demostraron que aquellos hombres que habían consumido una cantidad importante de azúcar (más de 67 gramos por día) eran un 23% más propensos a sufrir enfermedades mentales comparados con aquellos que consumían menos de 39,5 gramos al día. Por otra parte, los investigadores no encontraron evidencia de una asociación estadística contundente en cuanto a las mujeres.
Un verdadero avance
Si bien no es la primera vez que se realizan estudios que vinculan el azúcar con la depresión, hasta ahora se pensaba que el consumo alto de azúcar refinada se daba como resultado de la enfermedad. Esta investigación, sin embargo, demuestra que existe la posibilidad de que sea a la inversa, es decir, que el consumo excesivo de azúcar aumente las posibilidades de padecer depresión.
El informe, publicado en el Scientific Reports, es de gran relevancia porque sostiene y profundiza en la hipótesis de que el consumo excesivo de azúcar refinada produce consecuencias negativas para la salud psíquica y aumenta las probabilidades de sufrir enfermedades como la depresión. Entonces, cuando se recomienda reducir su consumo ten en cuenta que no solo estarás beneficiando tu cuerpo, sino también tu mente.