Si bien el índice de obesidad de niños de países ricos podría haber topado, los menores de países en desarrollo cada vez suben más de peso por comer alimentos poco saludables, de acuerdo con un estudio.
A nivel mundial, los niños todavía están por debajo de su peso, o sea que no están obesos, aunque los investigadores creen que eso cambiará para el 2022 si el patrón continúa.
Científicos en Gran Bretaña y en la Organización Mundial de Salud encabezaron un análisis de información de más de 2.400 estudios que analizó la estatura y peso de unos 32 millones de niños desde los 5 hasta los 19 años. Ellos crearon modelos para calcular patrones de índice de masa corporal, medida basada en estatura y peso, de 1975 al 2016.
En los países desarrollados, los investigadores calcularon que los índices de obesidad entre niños y adolescentes recientemente habían topado a alrededor del 10% en Gran Bretaña y eso del 20% en Estados Unidos.
"Esto muestra que se puede hacer algo sobre la obesidad, pero sería una exageración llamar esto 'buenas noticias'", dijo Majid Ezzati, de Imperial College London, uno de los autores del estudio divulgado el martes. "Estos todavía son niveles muy altos y no queremos que se queden así, queremos que bajen".
Ezzati y colegas hallaron que en partes de Asia, el norte de África y el Medio Oriente, los índices de obesidad están subiendo. A nivel mundial, los índices de obesidad entre niños y adolescentes aumentaron de menos de 1% en 1975 por ambos géneros a alrededor de 6% por niñas y 8% por niños. Científicos calculan que eso representa unos 50 millones de niñas y 74 millones de niños.
El año pasado, los niños y adolescentes más obesos estuvieron en Nauru, las Islas Cook y Palau, pequeñas islas en Micronesia y el océano Pacífico Sur.