A medida que la edad y los kilos avanzan, las soluciones que aparecen suelen ser dietas milagro o ejercicios demoledores. Rutinas que apuntan al golpe de efecto, pero después se hace imposible sostener, incluso por sus riesgos en la salud.
Según Infobae, ya entrada en la cuarta década, la australiana Belinda Norton Smith decidió ir en contra de la regla: optó por una alimentación saludable y se convirtió en una suerte de gurú del fitness a través de Instagram, en donde expone los secretos de su transformación física.
1. Cardio en ayunas
Al comienzo del día, de acuerdo a Norton Smith, lo ideal es llevar adelante una rutina cardio de 30 minutos sin haber ingerido ningún alimento. "Podés caminar si no querés correr o si no podés salir de casa, saltá la soga o hacé bicicleta estática. Practicar ejercicio con el estómago vacío y después desayunar provoca que el metabolismo se active y ajuste tu ritmo cardíaco mientras se acelera la distribución de la sangre por todo el cuerpo", aseguró la hoy especialista en nutrición.
2. Circuitos de velocidad
Obtener su figura no es una tarea sencilla. Una de las claves fue hacer sesiones repetidas entre 10 y 15 veces cada una -tres días a la semana- de circuitos de velocidad con inclusión de peso y estiramiento. "Circuitos de 40 minutos aumentan tu masa muscular. No es necesario más", remarcó. "Son muy importantes porque a medida que envejecemos tendemos a perder el tono muscular y si no los construimos bien terminamos perdiendo la fuerza y la movilidad", agregó.
3. Seis comidas por día
"Las mujeres, sobre todo, necesitan seis comidas al día para estabilizar su metabolismo, por lo que es muy importante hacerlo", sostuvo la gurú. Según su mirada, en caso de saltearse una de las comidas, los niveles de azúcar suben y ocasionan ansiedad y peor estado de ánimo, que luego se ponen de manifiesto en el cuerpo.
4. Cuidado con el alcohol
En especial, durante los diez primeros días de cambio de rutina es indispensable una alimentación sana y, en ese rubro, el alcohol queda afuera -o casi-. "El alcohol está bien un viernes por la noche o en una fiesta especial, pero hay que tratar de evitarlo el resto de la semana. La gente suele olvidar la gran cantidad de azúcar que tiene el vino. Reemplazá esa por agua y vas a ver los resultados", comentó.
5. El cuidado de los abdominales
"Si lo que querés es una verdadera tabla de planchar, tenés que mirar con lupa lo que tomás y comer de manera sana o todo ese ejercicio no tendrá resultados", señaló. Los mejores ejercicios para tonificar, según ella, son los que "trabajan en ambos lados y las planchas con peso en las piernas". A diferencia de los abdominales clásicos, las planchas sirven para fortalecer otras zonas como la espalda, los brazos y los glúteos.
6. No obsesionarse con la balanza
Es habitual que, en medio de un cambio de hábitos, la balanza se vuelva más una obsesión que un aliado, que su revisión sea constante, varias veces por día y que de ahí surja la desesperación por ver resultados. Según Norton Smith, lo recomendable es pesarse una vez por día, siempre a la misma hora, desnudo o con poca ropa, para conocer la evolución que se tuvo una vez terminada la semana.