Durante el verano, las temperaturas suben y el calor puede convertirse en una verdadera pesadilla; es indispensable tomar medidas para poder paliarlo y no sufrir un golpe de calor o deshidratarnos.
Tanto dentro como fuera de casa, deberemos llevar a cabo algunas acciones que nos ayudarán a reducir el calor y hacer los días cálidos más llevaderos. Asimismo, debes saber que existen determinados colectivos a los que debe prestarse una mayor atención por el hecho de ser más vulnerables al calor. En unComo.com queremos que estés bien informado/a y te damos varios consejos sobre cómo combatir el calor.
Instrucciones:
1) El calor afecta a toda la población, pero no a todos por igual. Existen unos determinados grupos de riesgo que deben tomar mayores precauciones: personas mayores, niños, personas que realizan trabajos físicos, enfermos y los ciudadanos que toman muchos medicamentos.
2) Una de las principales formas de combatir el calor es beber mucho líquido, especialmente, agua pero también se puede reforzar con zumos naturales, leche, etc. Es importante evitar la deshidratación, bebiendo constantemente y antes de tener sed. También puedes ver aquí algunas recomendaciones para mantener a los niños/as hidratados en verano.
3) Evita salir de casa y hacer actividades físicas durante las horas de mayor insolación (horas centrales del día: de 12 a 16 h.). En caso de que debas hacerlo, deberás llevar ropa ligera y de colores claros; zapatos que permitan que transpiren los pies; y se recomienda proteger la cabeza con gorras, sombreros… y llevar gafas de sol. Con esto ayudaremos a prevenir la insolación o golpe de calor.
4) En casa, deberás impedir que entre el calor de la calle: durante el día, cierra puertas y ventanas, baja las persianas y corre las cortinas (que a poder ser deberán ser de color claro). Por la noche, que tiende a refrescar más, deberás abrir para ventilar tu hogar e intentar que corra el aire; para ello, abre ventanas opuestas.
5) También será necesario que en tus comidas optes por platos frescos y ligeros, que te ayudarán a no sentirte pesado, ni te supondrán un excesivo aporte calórico. Algunos ejemplos que puedes prepararte son ensaladas, cremas, sopas frías, batidos… aunque también puedes ver aquí cuáles son las mejores recetas para el verano.
6) Puedes utilizar aires acondicionados y ventiladores para combatir así las altas temperaturas. En el primer caso, deberás hacer un uso racional y encenderlo tan solo cuando sea realmente necesario y regulando la temperatura entre 24 y 26ºC. Si por lo contrario vas a usar un ventilador (cuyo consumo es mucho menor), te recomendamos los de techo ya que el aire caliente sube y el frío baja. Es importante llevar a cabo un correcto mantenimiento del aire acondicionado, por ejemplo limpiando los filtros.
7) Los electrodomésticos y demás aparatos electrónicos son una fuente de calor por sí mismos, por lo que deberás desconectar todo aquello que no estés utilizando. Así como también se recomienda no cocinar ni lavar ropa durante las horas de más calor, ya que generaremos más humedad en el ambiente y, por lo tanto, aumentará la sensación de calor.