La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó hoy una iniciativa global con el fin de reducir en un plazo de cinco años a la mitad los daños causados por errores de medicación en todos los países.
El desafío "Seguridad global del paciente, seguridad en la medicación" pretende corregir las debilidades en los sistemas sanitarios que conducen a errores de tratamiento farmacológico y, como resultado, a graves daños en la salud.
Tanto los trabajadores sanitarios como los pacientes pueden cometer errores como mandar, prescribir, dispensar, preparar, administrar o consumir el medicamento equivocado o la dosis errónea en el momento equivocado.
La OMS describe vías para mejorar la manera en que se prescriben, se distribuyen y se consumen los fármacos y sensibiliza a los pacientes sobre los riesgos asociados al uso inadecuado de los mismos, según un comunicado.
Los errores de medicación causan al menos una muerte al día y provocan daños a aproximadamente 1,3 millones de personas cada año solo en Estados Unidos, afirma la OMS.
Si bien se estima que los países con ingresos bajos y medios presentan tasas similares de casos adversos relacionados con la medicación a las de aquellos con ingresos altos, el impacto es aproximadamente el doble en términos del número de años de vida saludable perdidos.
A nivel mundial, el coste asociado con errores de medicación se ha estimado en 42.000 millones de dólares anualmente (38.699 millones de euros), casi el 1 % del gasto sanitario global.
"Todos esperamos que, cuando tomamos medicamentos éstos nos ayuden y no nos dañen", señaló la directora general de la OMS, Margaret Chan, citada en la nota.
Añadió que, "además del coste humano, los errores de medicación suponen una presión enorme e innecesaria sobre los presupuestos de salud. Prevenir los errores ahorra dinero y salva vidas".
La iniciativa insta a los países a tomar medidas prioritarias para prestar especial atención a las medicinas con un elevado riesgo de causar daños si se ingieren de manera incorrecta, a los pacientes que toman varios fármacos para diferentes enfermedades y condiciones de salud y a las personas que pasan por una transición en el cuidado médico.
Las actuaciones se centrarán en cuatro áreas: los pacientes y el público, los profesionales de la salud, medicamentos como productos y sistemas y prácticas de medicación.