El tamaño del cerebro de los primates viene determinado por la dieta más que por los factores sociales, según reveló hoy un estudio de antropólogos de la Universidad de Nueva York (NYU) publicado en la revista Nature.
Estos resultados ponen en entredicho la llamada hipótesis del "cerebro social", que planteaba que el cerebro de los humanos y de los simios era grande debido a factores sociales.
Además, el descubrimiento refuerza la idea de que la diferencia entre el cerebro de los humanos y el resto de primates radica no en la socialización sino en la alimentación.
El profesor del departamento de antropología de la NYU y coautor del estudio, James Higham, explicó que tradicionalmente el pensamiento dominante ha sido que "los humanos y demás antropoides tienen el cerebro grande debido a la presión social y a la necesidad de tener que pensar para relacionarse".
Pero, su investigación echa por tierra esa argumentación y apunta "a otros factores, especialmente a la dieta", como determinantes en el desarrollo del cerebro.
"Además, las complejas estrategias de búsqueda de alimento, las estructuras sociales y las habilidades cognitivas también han influido en la evolución del seso de los primates", añadió otro de los autores, el profesor Alex DeCasien.
"De todos modos, si la pregunta es qué factor es más determinante, los sociales o la dieta, nuestro estudio sugiere que la dieta", agregó.
Los científicos examinaron para su estudio la alimentación y factores sociales, como tamaño del grupo o sistema de emparejamiento, de más de 140 especies de primates.
Los resultados mostraron también que aquellos que se alimentaban de fruta y hojas presentaban un cerebro significativamente más grande que el resto.