Desde que asume el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional (GRUN) en 2007, se ha puesto en práctica una política de protección y defensa de nuestra Madre Tierra, lo que se manifiesta en los planteamientos del Programa Nacional de Desarrollo Humano. En concordancia con esta política, Nicaragua fue la primera signataria de la “Declaración Universal del Bien Común de la Tierra y la Humanidad” en el año 2010.
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El GRUN ha considerado que el Cambio Climático es uno de los principales obstáculos para el desarrollo de Nicaragua y uno de los principales riesgos que enfrenta la humanidad. Así, tanto la política internacional como nacional han reflejado esta primera prioridad desde el primer día del gobierno en 2007, las que se resumen a continuación.
Política Internacional
Nicaragua ratificó la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático en 1995 y en 1999 fue ratificado el Protocolo de Kioto. Estos instrumentos internacionales establecieron mandatos y compromisos para los países desarrollados, siendo lo más relevante el principio de Responsabilidades Comunes pero Diferenciadas, los Mecanismos de Desarrollo Limpio, Transferencia Tecnológica y compromisos de reducción de emisiones legalmente vinculantes para los países desarrollados, conocidos como Anexo 1.
El Protocolo de Kioto que entró en vigor en 2005. Es un excelente acuerdo climático, legalmente vinculante que postulaba un objetivo global de reducción del 5% de las emisiones del año 1990, con la misma fórmula (5% de 1990) para los países Anexo 1 “Desarrollados”.
En la Enmienda de Doha de 2012 se elevó la meta a 18% de las emisiones globales de 1990 y para cada uno de los países Anexo 1. También se extendió el periodo de vigencia del Protocolo de Kioto de 2013 a 2020, en dicha fecha el Protocolo de Kioto debe ser absorbido bajo el Acuerdo de Paris con los términos del mismo prevaleciendo. Todavía no ha entrado en vigor la Enmienda de Doha, debido a que, al 27 de mayo de 2020, 138 países han ratificado de las 144 ratificaciones necesarias para entrar en vigencia.
Un problema en las negociaciones era que Estados Unidos era signatario del Protocolo de Kioto, pero el Congreso de dicho país nunca lo ratifico.
Las formaciones de dos grupos de trabajo en Bali fueron negociadas con el objetivo de incluir a los Estados Unidos a pesar de no estar en el Protocolo de Kioto. La Unión Europea y la derecha latinoamericana (Grupo de Lima) aceptaban el acuerdo hecho por Estados Unidos y acordado con la China en COP15 en Copenhague ante la desesperación del Presidente Obama de lograr un acuerdo por razones políticas norteamericanas.
Para los chinos “Salvar Cara” es muy importante, pero también se puede “Dar Cara” a una parte en apuros.
A partir de la COP17 de Durban en el 2011, se empezaba a definir los futuro contenidos del Acuerdo de Paris. La Unión Europea y la Derecha Latinoamericana, dieron concesión tras concesión a Estados Unidos. Primero se definió que en vez de vinculante el acuerdo serio, “Un acuerdo bajo la convención con fuerza de ley”.
Ni los abogados de Estados Unidos podían explicar que quiere decir eso, lo único que se sabe es que no quieren decir legalmente vinculante, porque eso es lo que se está remplazando. Así mismo se complació a Estados Unidos en definir que todos los compromisos de las NDC serían voluntarios y definidos por cada país, tanto desarrollados como en desarrollo. Europa con Estados Unidos trataron de abolir “Necesidades Comunes, pero Diferencias” y “Responsabilidades históricas” con un concepto de Responsabilidades Universales” Sin embargo, dado la tenaz resistencia de los países en desarrollo encabezados por los Países de Ideas Afines, con un protagonismo muy destacado de Nicaragua, se logró impedir ese cambio.
Dadas todas las concesiones realizadas a Estados Unidos, tuvo que ser una sorpresa muy desagradable para Europa y la Derecha Latinoamericana cuando en el Acuerdo de Paris, la Administración Trump anuncia que se va a retirar del acuerdo. A la vez de terminar su contribución a la UNFCCC, IPCC y FVC, siendo las cuotas de Estados Unidos las mayores en su calidad de mayor economía del mundo.
No obstante, su intención de retirarse del Acuerdo de Paris, Estados Unidos jugo un papel negativo en la COP 25 de Santiago/Madrid bloqueando toda iniciativa de finanzas climáticas y los esfuerzos de países en desarrollo encabezado por Nicaragua de elevar Perdidas y Daños al mismo nivel que Mitigación y Adaptación, así como lograr financiamiento para las localidades que han sufridos Perdidas y Daños Catastróficos, tales como; Dominica, Barbuda, Abaco, Gran Bahamas, entre otros.
El esfuerzo diplomático en las negociaciones internacionales sobre el Cambio Climático apegado a la ciencia sobre este flagelo planetario, ha hecho que nuestro país logre importantes consensos entre los países en desarrollo.
Nicaragua como vocero y negociador principal del ALBA en la COP15 en Copenhague en 2009, participo en impedir la imposición de un acuerdo consensuado entre los principales países emisores al margen de las negociaciones de Naciones Unidas, sin transparencia o participación, así como forma antidemocrática.
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