La canciller alemana Angela Merkel pidió este martes al presidente ruso Vladimir Putin reactivar el proceso de paz en Ucrania y defendió los derechos de los homosexuales en Rusia, en un encuentro que dejó patente la frialdad entre ambos.
Merkel, que se reunió con Putin en el balneario de Sochi (sobre el mar Negro), en su primera visita a Rusia desde 2015, instó al presidente ruso a garantizar un alto el fuego en Ucrania, pero éste culpó a Kiev del fracaso de los acuerdos de paz entre las tropas ucranianas y los separatistas prorrusos del este del país.
La canciller alemana también aprovechó su visita para abordar con Putin la cuestión de los derechos en Rusia, incluida la situación de los homosexuales en Chechenia donde, según varios testimonios, muchos gais son detenidos e incluso torturados por las fuerzas de seguridad.
"Creo que tenemos desacuerdos, pero la política internacional significa que siempre hay que seguir buscando el diálogo", declaró Merkel en la rueda de prensa que dio junto con Putin, después del encuentro.
El objetivo de la reunión consistía en preparar la próxima reunión del G20, que se celebrará los días 7 y el 8 de julio en Hamburgo.
Las relaciones entre Alemania y Rusia se tensaron por la crisis en Ucrania, con lo que los vínculos de Moscú con la Unión Europea (UE) llegaron a un nivel de deterioro inédito desde el final de la Guerra Fría.
Merkel, que siempre defendió las sanciones impuestas por los europeos a Moscú por la anexión de Crimea y por su supuesto papel en el conflicto ucraniano, aseguró este martes que esperaba poder levantar algunos de esos castigos si se aplica el moribundo acuerdo de paz que promovió junto con el presidente francés François Hollande en 2015.
A pesar de los desencuentros, Putin defendió la necesidad de aplicar ese plan de paz. "No podemos pensar en ninguna alternativa y no deberíamos tener que pensar en una", dijo el presidente ruso en la rueda de prensa.
Derechos de los gais
Putin abordó, asimismo, los vínculos económicos entre Alemania y Rusia, insistiendo en el hecho de que su "colaboración contribuye de forma significativa a estabilizar el mundo económico".
Durante la rueda de prensa, Merkel se mostró preocupada por la situación de los gais en Rusia. "También he hablado de ese informe muy negativo sobre lo que les ocurre a los homosexuales en Chechenia", aseguró. "Y he pedido al presidente que utilice su influencia para proteger los derechos de las minorías", añadió.
Según el periódico ruso Novaia Gazeta, las autoridades chechenas detuvieron a más de 100 homosexuales e incitaron a sus familias a matarlos para "lavar su honor".
Ramzan Kadirov, líder de Chechenia, una pequeña república musulmana del Cáucaso ruso, negó estas acusaciones, después de que Rusia abriera una investigación sobre lo ocurrido.
Putin aprovechó la rueda de prensa para negar que Rusia tuviera intención de influir en las elecciones alemanes de este año, meses después de que se acusara a Moscú de interferir en los comicios estadounidenses. "Nunca nos entrometemos en la vida política o en los procesos políticos de ningún otro país", zanjó Putin.
Conversación con Trump, reunión con Erdogan
Tras su encuentro con Merkel, Putin tenía previsto mantener este martes su tercera conversación telefónica con su homólogo estadounidense Donald Trump. Ambos líderes tratan de mejorar su relación a pesar de sus desencuentros sobre el conflicto en Siria.
Y el miércoles, Putin recibirá también en Sochi al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, cuyas relaciones con Alemania también se han deteriorado en los últimos meses.