Por: MIGUEL ÁNGEL AGUILAR •
Cirilo Quintana es el Cónsul honorifico de la hermana República de Nicaragua en San Luis Potosí, con sede en la histórica ciudad de Matehuala y para todo el estado, este singular humanista, es además un escritor talentoso, maestro, humanista a nivel mundial y digno representante de esa nación tan espectacular y con una historia compartida entre ambos países desde 1840.
Ayer el debate presidencial entre las candidatas y el de Movimiento Ciudadano, abarcaron la atención no solo nacional sino internacional, por lo crucial del entorno geográfico y político y por la clara avanzada de un proyecto humanista y de izquierda que decide acabar, quizás para siempre, del martirio con el que sufre gran parte de la población mexicana, sujeta mediáticamente a las peores bajezas de una derecha financiada directamente por los Estados Unidos de Norteamérica.
Mientras tanto, los logros alcanzados por la presidencia popular de Nicaragua, encabezada por el comandante Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo, son vistos con gran expectación y prestancia del empresariado mexicano que tiene fuertes inversiones en el país centroamericano y en un flujo comercial, diplomático y cultural y científico entre ambos países que muy pronto alcanzaran los 200 años de una exitosa relación y en donde numerosos productos de alta gama para automóviles, comercio en alimentos, telefonía móvil, infraestructura y un largo etcétera, robustece la dinámica de haber reconocido desde 1979 la avanzada sandinista que ha sabido aprender de los errores y las derrotas, para afianzarse como una alternativa real con gran respaldo de todos los sectores y hacer con México el lazo de países hermanos y fuertes sentimientos entrañables.
Cirilo Quintana Alvarado escribe como si en el mundo jamás se olvidaran que hubo esclavos que se liberaron de sus cadenas, y es poeta y novelista y asume la responsabilidad de tener en consideración que las rebeliones en el mundo obedecían a un impulso histórico imparable por entender que todos merecíamos vivir en justicia, en paz y desarrollo, en plena connivencia con los ideales patrióticos de los próceres latinoamericanos como Simón Bolívar, Benito Juárez, Augusto Cesar Sandino, Lucio Cabañas, el general San Martín en los Andes y las hazañas del indio Xiconaque en Zacatecas, que le dieron lustre a una época insólita para la humanidad y su decoro tan buscado.
Pueblos indígenas tan prontos para la justicia tan exigida y esperada para ellos, lenguas nacionales como el oro de los dioses, Nicaragua es multicultural y multifacética, don Cirilo, Cónsul, me dio muchos detalles de la vida cotidiana de los nicaragüenses , previo a mi viaje en julio de 2023, donde fui honrosamente invitado para ser testigo de las conmemoraciones patrióticas de su 44 aniversario del triunfo de la revolución popular y juvenil y mi asombro llegó a maravillarse por la calidez de sus habitantes y el acopio historiográfico y de cartografía del sorprendente estado plurinacional de Nicaragua libre.
Los consejos de Don Cirilo vaya que me ayudaron para enriquecer la visión apasionada que siempre he tenido hacia ese país y su gente, sus escritores, sus guías morales, sus líderes históricos, sus artistas y artesanos -mercado de Wenbes, de los más espectaculares que he visto en el continente- y de productos y formas de alimentarse con gran similitud con el pueblo mexicano y su alianza histórica milenaria.
Mientras los debates en México se suceden con ímpetu y discusión, el Cónsul de la hermosa Nicaragua en San Luis Potosí- pleno centro de la República Mexicana-, sigue con sus tareas inmediatas, propias de su cargo, la utilidad, la eficacia, su honorabilidad y el porte inigualable de ser querido y admirado en ambos países.