Con el objetivo de fomentar el conocimiento forestal, Arboretum Nacional, junto al Instituto Nacional Forestal (INAFOR), realizaron, a través de diferentes actividades recreativas, un taller educativo sobre la preservación y amor de los árboles bajo el lema «Reforestar Para Respirar».
Este enriquecedor encuentro se desarrolló en el hermoso entorno del parque ecológico, brindando a los participantes la oportunidad de aprender acerca de la plantación y el cuidado de árboles medicinales.
«Estamos promoviendo, a través del Arboretum Juan Bautista, la educación ambiental fomentando el amor, cuidado y la conservación de nuestros recursos forestales. En este caso, estamos bajo el lema ‘Reforestar para Respirar’, en el cual nuestra niñez nicaragüense va a conocer cuál es la importancia de la reforestación y cuáles son los beneficios que nos trae reforestar»mencionó María Elena Smith, especialista forestal del Instituto Nacional Forestal.
«y cómo pueden hacer los niños para que tengan un conocimiento desde pequeños del cuidado y amor de nuestros recursos forestales. En este caso, cómo plantar un árbol y que ellos puedan transmitir este conocimiento a toda la comunidad«; detalló Smith.
Educación ambiental en el Arboretum Nacional
Resulta gratificante observar cómo este proyecto impulsa la educación ecológica, proporcionando a los niños desde temprana edad valiosos conocimientos sobre los beneficios y la importancia de cada árbol. La iniciativa no solo se centra en inculcar prácticas sostenibles, sino que también destaca el papel esencial que desempeñan los árboles en el equilibrio ambiental.
Carlos Josué comentó, «Aquí aprendemos muchos árboles de muchas especies. Lo primero es hacer un hoyo no tan grande porque si no, la planta se va a hundir. Después le sacamos la tierra. El paso dos es cuando tenemos la planta le quitamos la bolsa con mucho cuidado porque se puede desmoronar. Después, como paso 3; le echamos agua y la sembramos».
La plantación de árboles aporta innumerables beneficios tanto para nosotros como para el medio ambiente, y es fundamental que los más pequeños del hogar comprendan la trascendencia de este acto.
Detenerse a reflexionar sobre las contribuciones positivas que ofrecen los árboles nos permite apreciar la conexión directa entre nuestra acción y la salud del entorno que nos rodea. En este sentido; la educación temprana sobre estos temas contribuye a formar ciudadanos conscientes y comprometidos con la preservación de nuestro entorno natural.
Nota de Xochilt Treminio