Una aeronave Boeing 737-900 de la línea aérea El Astillero, proveniente de la República de Mérida con 118 pasajeros; sufrió un incendio tras salirse de la pista debido a un problema eléctrico.
Se trató del simulacro general de accidente aéreo en el Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino, aprobado por el Instituto Nicaragüense de Aeronáutica Civil (INAC), realizado el 22 de noviembre a las 2:50 de la tarde.
«Este ejercicio lo planificamos desde hace tres meses. Venimos realizando todas las coordinaciones con las instituciones participantes, como bomberos, ejército, policía, la autoridad de Aeronáutica, Sinapred. Y todas las entidades que operan en el aeropuerto, como Aduanas y Migración«; explicó Marvin Padilla Fonseca, subdirector general del aeropuerto.
Ambulancias, patrullas, camiones bomberiles, unidades médicas, helicópteros, unidades de medicina legal y microbuses fueron desplazados hasta la zona del simulado desastre, junto con hombres y mujeres capacitados para responder y atender pacientes. «Dentro de este ejercicio participaron 150 personas, entre actores y el personal de asistencia», agregó Padilla.
Simulacro de accidente aéreo
Este simulacro, que se realiza cada dos años, permitió comprobar el dominio del plan de emergencia y fortalecer la coordinación interinstitucional. También garantizó una respuesta efectiva ante emergencias reales y cumpliendo normativas aeronáuticas internacionales.
«Para mantener el certificado operativo del aeropuerto, debemos realizar un simulacro general cada dos años, dos parciales cada año y uno de mesa cada seis meses»; detalló Padilla.
De esta forma, el ejercicio demostró que Nicaragua está lista para responder eficazmente en caso de presentarse un hecho de esta magnitud. Además, sirve para saber reconocer momentos que puedan mejorarse o también optimizar los tiempos. Estas son experiencias que luego pueden salvar vidas.