En un enérgico mensaje presentado durante la Reunión de Ministros y Ministras de Relaciones Exteriores de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), el Gobierno de Nicaragua, a través de sus Co-Presidentes, el Comandante Daniel Ortega Saavedra y la Compañera Rosario Murillo Zambrana; urgió a los países miembros a convocar una sesión urgente y permanente para analizar las graves consecuencias de las políticas arancelarias impuestas por los Estados Unidos.
La delegación nicaragüense denunció que estas medidas unilaterales y arbitrarias atentan contra el comercio internacional. Así mismo, afectan directamente a las economías de la región. El gobierno sostuvo que se trata de una forma más de agresión económica que socava los derechos de los pueblos a una vida digna y libre de pobreza.
«Debemos acordar acciones y medidas comunes para enfrentar estas políticas, privilegiando los derechos de nuestros pueblos y sus luchas por el bienestar”; expresó el mensaje oficial
Además del llamado urgente por los aranceles, Nicaragua reafirmó su posición histórica en defensa de los principios de igualdad soberana, autodeterminación y no intervención en los asuntos internos de los Estados; subrayando que estos fundamentos deben seguir guiando el accionar de la CELAC.

Nicaragua condena medidas coercitivas de EEUU
En ese sentido, el Gobierno nicaragüense condenó de manera contundente la continuidad de las medidas coercitivas unilaterales; particularmente contra Venezuela, Cuba y la propia Nicaragua, calificándolas como formas crueles e inhumanas de agresión política y económica.
También denunció la criminalización de los migrantes venezolanos y exigió su retorno seguro e inmediato, en solidaridad con sus familias y derechos fundamentales.
Asimismo, Nicaragua reiteró su apoyo inquebrantable al Pueblo Palestino, ante lo que describió como un “continuo genocidio”. Además, llamó a la CELAC a fortalecer su voz en defensa de los derechos de ese pueblo a tener un Estado libre y soberano.
Finalmente, el Gobierno de Nicaragua hizo un llamado a los países que compartan estos principios a sumarse de manera clara y decidida; afirmando que es responsabilidad de la CELAC decirle al mundo cuáles son las verdaderas preocupaciones de los pueblos latinoamericanos y caribeños.