Comprender, comunicarse e incluir a la vida social sin estigma a las personas con discapacidad auditiva es en Nicaragua cada vez más relevante, y por eso se crean espacios para aprender su lenguaje. Con este propósito se desarrolló en la Universidad Americana el primer curso de lenguaje de señas, en nivel básico.
Estudiantes de distintas carreras participaron en este proyecto que fue propuesto por el Ministerio de la Juventud y llevado a cabo en la casa de estudios superiores de manera conjunta.
«Hemos desarrollado con estos protagonistas diversos encuentros. Hemos hecho práctica e intercambio con la comunidad sorda para que los jóvenes puedan tomar sus habilidades adquiridas en este curso y llevarla a la práctica. Esto fue un curso intensivo y se graduaron 29 protagonistas»; explicó Katherine Montenegro, del Ministerio de la Juventud.
El éxito del taller alienta a ambas instancias involucradas a expandir la iniciativa e involucrar en el futuro próximo a más estudiantes para formar a profesionales con mayores capacidades.
Formación de calidad con la UAM en Nicaragua
«La Universidad Americana tiene como meta formar mínimo a tres generaciones que dominen el curso básico de lenguaje de señas. Y posteriormente ir subiendo de nivel, nivel intermedio, nivel avanzado y posteriormente lanzar un curso para las personas que no sean de la universidad»; indicó Nancy Santeliz, coordinadora de proyección social, UAM.
La convocatoria despertó el interés de estudiantes de ciencias médicas y carreras administrativas. Algunos de ellos respondiendo a necesidades personales y familiares; una oportunidad que tuvieron sin incurrir en costos.
«Tenemos a estudiantes que tienen familias con discapacidad auditiva, están compartiendo y quisieron aprender porque van a poder a comunicarse ya con sus familiares y tienen el compromiso de ayudar«; agregó Santeliz.
El curso básico de lenguaje de señas culminó con la entrega de certificados a los jóvenes estudiantes de esta universidad en Nicaragua.