Desde el año 2009, Nicaragua se embarcó en un ambicioso proyecto: fortalecer los conocimientos médicos y especializados para realizar operaciones que anteriormente solo eran posibles con la ayuda de brigadas internacionales.
En el 2024, esta visión se ha convertido en una realidad tangible. La mejora en los programas de salud ha permitido salvar numerosas vidas, marcando un hito en la historia médica del país. Este reportaje nos presenta el caso de Marcelo, un niño de 11 meses que ha experimentado un viaje lleno de desafíos y esperanza.
Marcelo nació con una malformación congénita en su esófago, una condición que puso su vida en peligro desde el momento en que llegó al mundo. Durante los primeros 11 meses de su vida, Marcelo no pudo probar bocado alguno. Para sus padres, esta situación fue una pesadilla viviente.
Después de una primera operación sin éxito, se enfrentaron a la desesperación de buscar soluciones fuera del país, una opción inalcanzable para ellos.
Recuperación lenta pero segura
Cada visita al pediatra era un recordatorio doloroso de la lucha que enfrentaban como familia. Sin embargo, Marcelo se convirtió en un símbolo de fortaleza y esperanza en medio de la adversidad. El hospital La Mascota, en Managua, aceleró las gestiones para adquirir los insumos necesarios para su cirugía, demostrando un compromiso inquebrantable con la vida de sus pacientes.
El día de la cirugía fue un momento de tensión y expectación. A las 7:50 de la mañana, Marcelo ingresó al quirófano, donde un equipo multidisciplinario de médicos trabajó incansablemente para reconstruir su esófago. La operación fue un éxito, y a las 10 de la mañana, los doctores confirmaron que Marcelo estaba fuera de peligro.
La recuperación de Marcelo será un proceso largo pero seguro. Esta intervención quirúrgica, que se ha vuelto posible en Nicaragua desde el año 2009, marca un nuevo comienzo para él y su familia. Al salir del quirófano, los padres de Marcelo lo recibieron con lágrimas de alegría y amor. Ahora, miran hacia el futuro con esperanza, sabiendo que su pequeño luchador cumplirá su primer año en febrero, rodeado de amor y celebración.