El 2 de noviembre, también es un día comercial en Nicaragua, muchos se disponen a ofrecer sus servicios como la elaboración de recordatorios, placas y cruces para aquellas personas que ya no están físicamente.
“Tenemos precios módicos, los precios de una cruz, con una placa y un par de jarrones a 2 mil córdobas, son precios económicos, precios baratos porque aquí las elaboramos”; manifestó doña Francisca Briceño.
Esta artesana manifestó que tiene muchos años elaborando esas piezas para los difuntos, por lo que aprovechó para invitar a las personas a que les visiten en las afueras del cementerio general.
“Tengo 30 años de elaborar cruces, jarrones y placas. Yo fui la primera que me establecí en este cementerio”; explicó esta comerciante.
Un recuerdo inolvidable en un día especial para Nicaragua
Kimberly Núñez, originaria de Ciudad Sandino, con lágrimas en sus ojos, acudió a comprar un lindo arreglo floral al cementerio general para su bebé que hace un año se fue de este mundo.
“Luchamos con ella (niña) un mes y medio en La Mascota (hospital Manuel de Jesús Rivera), pero lamentablemente ella se rindió a la muerte. Y a un año, siempre la recordamos con amor. Le venimos a limpiar la tumba todos los domingos”; explicó esta joven de 19 años de edad.
En las afueras de los cementerios de Nicaragua, se venden las lindas flores naturales y artificiales, para adornar las tumbas de los seres queridos que ya pasaron a otro plano de vida.
“De todo vendemos, estamos preparados, el día de la venta es el 2 de noviembre. Estamos esperando a las personas a que nos compren aunque sea un ramito de flores para la tumba”; dijo doña María Elena Morales, vendedora de flores.
Invitó a las personas que están fuera de Nicaragua para que envíen sus remesas y se pueda comprar las flores para sus familiares.
Estos comerciantes afirman que tienen flores de 50 córdobas a más, y las flores son girasoles, rosas rojas y blancas, lirios, botonetas, entre otras.
