Una flor para Sandino fue depositada en el inmenso monumento que honra al General de Hombres y Mujeres Libres por representantes de la Juventud Sandinista; es decir, por las nuevas generaciones que trabajan inspiradas en la vida, lucha, obra y legado del héroe nacional.
La jornada estuvo marcada por la entrega de flores y la resonancia de música revolucionaria, rindiendo homenaje al legado imperecedero de Sandino y su lucha por la libertad y la justicia.
«Estamos trascendiendo, cumpliendo con el legado de nuestro General de Hombres y Mujeres Libres siempre a la vanguardia y a la defensa de la soberanía de nuestros pueblos, hoy con una juventud protagonista en todos los tiempos de esta revolución»; indicó Darling Hernández, Coordinadora nacional del Movimiento Ambientalista Guardabarranco.
El monumento a los héroes de la patria, erigido como símbolo de resistencia y sacrificio, se convirtió en el escenario central de la conmemoración para rendir tributo al líder sandinista cuya memoria sigue inspirando a generaciones.
La huella de Sandino, es la que sigue la juventud
«Hoy al tener 90 años el legado del General Sandino, su compromiso incaudicable de patria, libre o morir, siguen vigentes en esta juventud que sigue asumiendo grandes retos y desafíos en la educación, en la cultura, en el deporte y la comunicación y sobre todo en el amor al prójimo reivindicando también el derecho a las familias nicaragüenses de corazón a corazón»; expresó Hernández.
«El compromiso en los jóvenes y dentro de las familias nicaragüenses está presente en cada una de las obras que nosotros hacemos como jóvenes de la Juventud Sandinista. Estamos comprometidos a seguir ese legado de nuestro General»; dijo Lester Sánchez, una militante de la Juventud Sandinista.
La ceremonia de entrega de flores fue un acto de profundo significado simbólico. Cada flor depositada en el monumento representaba un compromiso renovado con los ideales de Sandino y una muestra de respeto hacia su legado. Rosas rojas, símbolos de valentía y pasión, y margaritas blancas; evocadoras de la pureza de sus ideales, adornaban el monumento, tejiendo un tapiz de emociones y recuerdos.
La música revolucionaria, con sus letras cargadas de resistencia y esperanza, proporcionó el acompañamiento sonoro perfecto para la ocasión.