Izquierda Castellana envía un saludo solidario y expresa su admiración al pueblo nicaragüense en el marco del acto central en Managua el 19 de julio, en conmemoración del 45º Aniversario del Triunfo de la Revolución Sandinista. Destacan la lucha continua de Nicaragua contra el imperialismo y la dictadura somocista, el papel crucial del Frente Sandinista y el apoyo de la Unión Soviética y Cuba.
Mencionan la complejidad del proceso revolucionario y la intensificación de la beligerancia en su contra, así como su ejemplo a seguir para movimientos revolucionarios internacionales. Concluyen con versos de Rubén Darío y los lemas: «¡Viva Nicaragua libre! ¡Viva la Revolución Sandinista!».
Da: internacional IzCa <[email protected]>
Data: 18 luglio 2024 alle ore 02:03:16 GMT-6
A: [email protected], [email protected]
Oggetto: saludo Izquierda Castellana Acto Central
en Managua el 19 de julio.
Ese “pequeño-gran” país, Nicaragua, que une los dos principales océanos planetarios, el Atlántico y el Pacífico, y de cuyo proceso revolucionario, coherente y complejo, tanto hemos aprendido y tanto nos queda por aprender.
Durante décadas, la lucha política, social y guerrillera se vuelca en la consecución de la soberanía nacional frente al imperialismo yanqui. Cuando éstos se van, dejan como cancerberos multimillonarios a los Somoza, familia criminal donde las haya. La lucha se torna entonces contra la dictadura somocista, que no deja de ser la representación del imperialismo.
Una vez llegado al poder el Frente Sandinista, después de su unificación, la huelga general del 20 de junio de 1979 y el movimiento insurreccional victorioso, comienza una etapa no menos compleja que la anterior. El imperialismo utiliza todos los recursos para derrotar al proceso revolucionario. La “contra”, la guerra organizada contra el pueblo y el Estado popular en construcción, obliga a tomar medidas necesariamente impopulares, como por ejemplo el reclutamiento obligatorio. El imperialismo utiliza nuevos “elementos creativos” para impulsar la contrarrevolución, como el uso perverso del indigenismo, instrumentalizando a los misquitos contra el proceso sandinista. Posteriormente, ya después de la vuelta al poder en 2007 del Frente Sandinista, utilizarán con semejante finalidad no al movimiento feminista, sino al “pseudomovimiento feminista” leal al pensamiento del Partido Demócrata de los EEUU.
La Unión Soviética y Cuba jugarán un papel de apoyo en todo momento a la Revolución sandinista. Es de destacar el carácter de amigo de la Revolución sandinista del dirigente de la socialdemocracia escandinava y primer ministro sueco, Olof Palme, asesinado por las fuerzas oscuras el 28 de febrero de 1986, seguramente por su posición de apoyo a las luchas progresistas en el mundo; Palme fue el primer dirigente occidental en visitar Cuba después de la revolución, entre otras cuestiones.
Reagan, el mayor impulsor de la “contra”, denominaba a sus componentes “defensores de la libertad”, de igual manera que ahora hacen con los nazis ucranianos ante la intervención de la OTAN contra Rusia en Ucrania.
En febrero de 1990, después de un periodo tremendamente duro para el proceso revolucionario, gana las elecciones la Unión Nacional Opositora (UNO) presidida por Violeta Chamorro. A pesar de ello, el Frente Sandinista mantiene el control del Ejército y de las Fuerzas Armadas en general, siendo el grupo mayoritario en la Asamblea Nacional, así como en la calle y el tejido social.
En 2007 el Frente Sandinista vuelve al poder tras vencer en las elecciones convocadas el 6 de noviembre de 2006, victoria que se repetirá en noviembre de 2016 con el 72,4% de los votos.
La Revolución Sandinista, un largo y complejo proceso revolucionario que ha ido madurando de forma espectacular con el paso de los tiempos, ha ido acompañada de una intensificación de la beligerancia en su contra por parte del imperialismo en los últimos tiempos, especialmente en el plano ideológico. Es un vivo ejemplo a seguir para el movimiento revolucionario a nivel internacional, muy particularmente en el Estado español.
Queremos enviar un saludo solidario y expresar nuestra profunda admiración al pueblo nicaragüense por su compromiso antiimperialista, antifascista y revolucionario.
Nos gustaría concluir con unos versos del gran poeta nicaragüense, Rubén Darío:
¿Qué hay de nuevo…? Tiembla la tierra
en La Haya incuba la guerra
los reyes han terror profundo
huele a podrido en todo el mundo
Versos de El canto errante
¡Viva Nicaragua libre! ¡Viva la Revolución Sandinista!
Izquierda Castellana
