Llena de alegría y risas, se realizó una mañana recreativa para los niños, niñas y adolescentes del Hogar de Protección Pajarito Azul. La actividad, que contó con un show de títeres, payasitos y deliciosos refrigerios, tuvo como objetivo brindar un momento de alegría a estos menores que viven con discapacidad.
El promotor solidario, Omar Góngora, mencionó: «Esto es parte del acompañamiento permanente que nosotros brindamos a las diferentes asociaciones a nivel nacional de personas con discapacidad y en saludo al 45 aniversario de nuestra gloriosa Revolución Popular Sandinista.»
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La actividad estuvo plagada de alegría y diversión, donde los menores que son cuidados en dicha casa de acogida, tuvieron un momento ameno y lleno de empatía; disfrutando de las diversas actividades que les tenían preparadas.
Más que un hogar de acogida, Pajarito Azul es una familia para los 73 menores que viven con limitaciones. Sin embargo, el Gobierno de Nicaragua promueve el desarrollo con calidez, calidad y amor para la restitución de los derechos de estos menores que fueron abandonados por sus padres.
Atención personalizada y con calidez en Pajarito Azul
La directora del hogar Pajarito Azul afirmó: «Acá en el hogar, se les brinda una atención de internamiento, pero más que una institución, somos una casa, en donde brindamos amor, respeto y educación».
«También tratamos que los chavalos, en medio de su situación, no vean su discapacidad como una limitante. Al contrario, para mí son los mejores maestros de la vida»; aseguró.
Estos menores, a pesar de sus condiciones físicas; demuestran que son seres llenos de inteligencia, amor y ganas de vivir.
Detrás de cada sonrisa de un niño con discapacidad hay una batalla ganada. Nicaragua actualmente está en una lucha constante para estar a la vanguardia con temas como la inclusión y la empatía. Abre tu corazón y comprende su lucha.
Nota elaborada por: Gema Ortiz
