Las negociaciones que abren a Nicaragua las puertas a un mercado conformado por más de 1,400 millones de consumidores han concluido con éxito. Los lineamientos del Tratado de Libre Comercio entre el país centroamericano y la República Popular China están concretados.
El TLC será firmado en agosto y entrará en vigencia en enero de 2024. Para Nicaragua, este tratado representa un objetivo estratégico cumplido en la lucha por erradicar la pobreza y potenciar los sectores económicos.
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«El TLC representa para Nicaragua una oportunidad importante para incrementar y diversificar nuestra oferta exportable y las inversiones; desarrollar el sector servicio dirigido a la producción y el turismo, e incrementar la oferta de materias primas; insumos y bienes de capital para la producción y también la oferta de bienes de consumo para nuestro país»; señaló Jesús Bermúdez, ministro de Industria y Comercio.
«China siempre considera las relaciones bilaterales desde una perspectiva estratégica y a largo plazo; considera la parte nicaragüense como un socio digno de confianza y apoya firmemente a la parte nicaragüense en la creación independiente de su camino al desarrollo acorde a sus condiciones nacionales, estamos dispuestos a hacer de las relaciones entre los dos países un modelo de amistad, de cooperación de diferentes tamaños», expresó Wang Wentao, ministro de comercio de China.
Los agentes económicos de todos los sectores tienen una oportunidad de proporciones extraordinarias con este acuerdo comercial; que también permitirá la aceleración del crecimiento de la economía de Nicaragua, según las valoraciones de las autoridades, más allá del 4%.
Nicaragua y China firman TLC para beneficiar a millones de nicaragüenses
«Abre las posibilidades de que el crecimiento del país de 3.4- 3.5 programado del 2023 al 2026 podría multiplicarse en unos dos puntos adicionales. Eso es muy relevante para la creación de empleos; creación de oportunidades y sobre todo cumplir con la misión más importante del país, que es la reducción de la pobreza; la reducción de la extrema pobreza, generando más y mejores empleos para todos los nicaragüenses»; indicó Iván Acosta, ministro de Hacienda de Nicaragua.
Las relaciones comerciales con el gigante asiático se traducirán también en incremento de las inversiones extranjeras directas y nacionales; por la relación necesaria entre comercio e inversiones.
«Un gran reto que fue asumido de negociar este tratado de libre comercio en un año y lo hemos logrado. Eso es gracias a la gran atención y esa relación de hermandad que existe entre nuestros gobiernos y nuestros pueblos. Aquí está nuestro gobierno sandinista, cumpliéndole al pueblo nicaragüense, cumpliéndole a todos para abrir mercados; para fortalecer los lazos de hermandad y cooperación con los pueblos del mundo y especialmente con la hermana República Popular de China»; sostuvo Laureano Ortega, asesor de Presidencia.